Con el propósito de preservar la variabilidad genética del azafrán y sus especies afines, evitando así que pueda desaparecer, se va a crear el Banco Mundial del Azafrán y las Especias en Cuenca y más concretamente en el Centro de Investigación Agraria de Albadalejito.
Al parecer se está perdiendo la diversidad genética a nivel mundial de esta tan utilizada especia que nos condimenta una gran cantidad de elaboraciones gastronómicas. El problema es serio, la Comisión Europea financia este nuevo proyecto, el banco de germoplasma (Crocusbank) con 2.634.169 euros, dato que muestra claramente la necesidad que ve la Comunidad Económica en cuanto a esta especia se refiere.
Mantener y conservar nuestra riqueza gastronómica es una tarea primordial, son varias las iniciativas para preservar distintos alimentos que corren el riesgo de desaparecer a largo plazo.