Con la llegada de la primavera, mi pequeño huerto urbano ha despertado de su letargo invernal y tengo el perejil que no cabe en su maceta. Así que pensé que sería una buena idea preparar este rico pesto de perejil y ajo.
Se trata de una versión patria del tradicional pesto de albahaca italiano, sustituyendo esta por el perejil, y dándole también más protagonismo al ajo, aunque sin olvidarnos de la importancia del parmesano y las nueces.
Preparar pesto es la cosa más fácil del mundo. Mantener las proporciones de los ingredientes es fácil, pero también es una salsa que admite variaciones en función del gusto de cada cual y de la textura que busquemos.
Para hacer pesto tan solo hace falta poner todos los ingredientes en el vaso de la batidora: las hojas de perejil, los dientes de ajo pelados, el parmesano rallado, las nueces peladas y el aceite de oliva. Luego trituramos bien y ya tenemos la salsa lista para acompañar, por ejemplo, un plato de pasta.
Con qué acompañar el pesto de perejil y ajo
Personalmente, me ha encantado esta receta de pesto de perejil y ajo. Es un poco más intenso de sabor y rudo en la textura que el pesto tradicional, pero eso no tiene por qué ser algo malo. No obstante, si el ajo no os entusiasma, quitadlo o poned solo un diente o incluso menos, aunque a mi me parece que combina perfectamente con el perejil.
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