Nuevamente como ya hice en otra entrada, designo a este pollo como “a mi manera” por que son recetas que se van pasando de generación en generación sin que nadie les haya dado un nombre específico, pero está riquísimo e incluso tiene mucho mejor sabor si se deja para el día siguiente.
Ingredientes: 1 pollo en trozos no muy pequeños, 10 cucharadas de aceite, 1 cebolla, 1/2 vaso de coñac, 1/2 vaso de vino blanco, 1/2 vaso de agua, 2 ajos, harina para rebozar y sal.
Preparación: En una sartén ponemos el aceite y vamos friendo el pollo que previamente habremos enharinado, lo vamos pasando a una tartera, y reservamos. En ese mismo aceite agregamos la cebolla bien picadita, dejamos que se dore un poquito y le añadimos el vaso de coñac, dejamos que reduzca. Por otro lado machacamos en un mortero los ajos con la sal y le añadimos el vino blanco y el agua, todo esto se lo agregamos al aceite previamente preparado y dejamos que se ligue toda esta salsa.
En la tartera que habíamos reservado el pollo vertemos, toda esa salsa, lo movemos un poco para que la cebolla se vaya al fondo y cuando rompa a hervir, bajamos el fuego para que se cocine a fuego lento mínimo durante 1 hora aproximadamente.
Se puede acompañar con cualquier tipo de guarnición, pero os diré que a mi especialmente me encanta con puré de patatas.
En Directo al paladar | Pollo con salsa de yogur, Brochetas de pollo con salsa de cacahuete, Pollo aromático a la cazuela