La historia, la cultura, el arte en Sanlúcar de Barrameda no se puede entender en toda su dimensión sin tener en cuenta las bodegas de la zona. Es más, el vino ha sido el más importante recurso económico a través de su historia.
Cascos de bodegas tricentenarios, casas-palacio de indudable valor arquitectónico e histórico son hoy algunos de los legados de la expansión económica y el prestigio mundial que adquirió la zona gracias al mundo del Sherry. Antaño símbolo de prosperidad, hoy su crimen es estar ubicados en pleno centro sanluqueño.
Parece ser que el ladrillo manda, y que se lleva todo por delante. Una lástima.
¿Estamos a tiempo? ¡Salvemos Arizón!
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