Es la imagen icónica de toda crisis: colas de personas llenando grandes carros con comida ante la posibilidad de no poder abastecerse en los días venideros. Una estampa que muchos madrileños esperaban encontrarse hoy en los supermercados, después de que la comunidad anunciase el cierre de todos los centros educativos durante las próximas dos semanas y recomendase trabajar desde casa.
En cuanto se anunciaron las medidas, empezaron a circular por el WhatsApp de todos los madrileños imágenes de estanterías vacías y grandes colas en las cajas de los supermercados. Pero lo cierto es que, tras comprobar in situ la situación de varias cadenas, no podemos hablar en absoluto de una situación general de desabastecimiento.
Como han explicado a Directo al Paladar varios empleados de las cadenas que hemos visitado, sí se está notando desde ayer por la tarde una mayor afluencia de público, y hay colas en muchos supermercados. Pero, aunque veamos a algún anciano arramplar con las tortillas de patata precocinadas, son pocos los que están llenando el carrito en modo apocalíptico. Todos los cajeros con los que hemos hablado coinciden en la misma idea: la gente está haciendo la compra para dar de comer a los niños que, a partir de mañana, van a estar en casa.
Se os va la pinza, en serio. Foto de Villanueva del Pardillo (Madrid) pic.twitter.com/PmEZs5R82q
El escenario cambia mucho entre barrios. Hemos confirmado que hay grandes colas y faltan productos en supermercados de barrios residenciales y con gran densidad de población infantil como Las Tablas o Sanchinarro, donde hay personas que han esperado hasta una hora para poder hacer la compra. Sin embargo, en la capital, al menos por el momento, no falta de nada.
También hay saturación en los pedidos a domicilio: el aumento en las ventas hace imposible realizar las compras online con normalidad. A todo el mundo se le ha ocurrido a la vez que es mejor que alguien te traiga la comida.
No hay problemas de suministro
Desde la Asociación Nacional de Grandes Superficies (Anged), que engloba a empresas como El Corte Inglés, Carrefour, Auchan o Eroski, insisten en que el stock de productos está garantizado, y, aunque ha habido un pico de ventas y problemas “puntuales” de suministro, la situación es similar a la que se da en otros periodos como la vuelta de vacaciones (aunque sin haberla previsto de la misma forma).
Algo parecido afirman desde Mercadona, compañía a la que ha pillado la crisis justo el día en el que presentaba sus resultados anuales. Su portavoz explica a Directo al Paladar que “hay absoluta normalidad de abastecimiento en las tiendas de Madrid”. El propio Juan Roig ha asegurado en rueda de prensa que el surtido está garantizado, pese a la “reacción impulsiva” de los consumidores registrada entre ayer y hoy.
Otra de las patronales del sector, la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS), que representa el 67,6% de la superficie de venta de alimentación, asegura en un comunicado que “en España existe una tienda de distribución moderna por cada 2.000 habitantes; sumando a la distribución detallista tenemos una tienda por cada 840 consumidores, muy superior a la mayoría de los países europeos”. Esta “capilaridad”, insiste la patronal, permite hacer frente a situaciones extraordinarias como esta.
🔴 #Coronavirusmadrid
Esta pasando, estanterías vacías, lo primero que ha volado: pollo, legumbres, papel higiénico y patatas.
Es el @alcampo de Moratalaz en #Madrid pic.twitter.com/ArMMmfad3F
Por el lado de los fabricantes, tampoco esperan tener problemas de stock. De hecho lo que les preocupa es que sobre producción.
Como explica a Directo al Paladar la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), la actividad comercial y logística china está por el momento prácticamente paralizada, lo cual dificulta la entrada de cualquier producto en este país. Y China es un gran mercado para la industria alimentaria española: en 2018 se exportaron al país asiático productos por valor de 1.067 millones de euros. Fuera de la Unión Eurpea, explica FIAB, China es el segundo destino de las exportaciones alimentarias españolas, después de Estados Unidos (país sobre el que planea también la sombra del coronavirus).
Restaurantes y bares ven peligrar el negocio
Víctimas importante de la crisis del coronavirus van a ser los bares y restaurantes, que pueden verse enormemente afectados por la limitación en los desplazamientos y el auge del teletrabajo.
Según José Luis Yzuel, presidente de la Confederación Española de Hostelería, la crisis del coronavirus podría afectar gravemente al 90 % de las empresas hosteleras. “Va a depender mucho de las medidas que se tomen, pero si nos fijamos en los italianos es bastante preocupante”.
Para contrarrestar el bajón en ventas en bares y restaurantes cuyo negocio es dar de comer a trabajadores o turistas, se espera un auge en la venta de comida a domicilio. Yzuel cree, no obstante, que esto no va a tener un impacto positivo en la mayoría de empresas. “Hay 315.000 restaurantes en nuestro país, pero que vendan a domicilio habrá una decena de miles, explica el presidente de la patronal hostelera. “No creo que se pueda mitigar. Va a depender mucho de las medidas que tome el Gobierno y las autoridades sanitarias, y solo pedimos estar presentes en ese diálogo”.
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