Pepsico asegura que fueron ellos los que decidieron romper con Carrefour. La cadena persiste en el boicot, que llega a España

La guerra abierta entre Pepsico y Carrefour está lejos de cerrarse. El conflicto, sin precedentes, entre el tercer grupo de supermercados y la segunda mayor compañía de alimentación del mundo ha vivido esta semana un nuevo episodio, con declaraciones cruzadas y palabras gruesas.

Las guerras de precios entre grandes compañías de distribución son la tónica en una industria en la que los márgenes de beneficios dependen en gran medida de grandes economías de escala donde los precios finales se cuentan por céntimos, pero lo que no es para nada habitual es que estos conflictos se hagan públicos.

Así lo hizo Carrefour cuando, hace ya una semana, anunció –a través de declaraciones en prensa, pero, también, con carteles en sus supermercados– que dejaría de vender los productos de Pepsico en sus tiendas de Francia, España, Italia y Bélgica. Los motivos: la “inaceptable” subida de precios de la multinacional.

Un órdago de la multinacional francesa que Pepsico tardó en responder unos días, hasta que el pasado martes, en una exclusiva del Wall Street Journal, un portavoz de la compañía aseguró que, en realidad la ausencia de sus productos se debe a “el resultado de negociaciones contractuales” y una “decisión” propia. O, dicho de otra forma, Pepsico habría dejado de suministrar sus productos –entre los que se encuentran, además de sus refrescos, las patatas Lay´s o el gazpacho Alvalle– por no haber llegado a un acuerdo sobre los precios con Carrefour.

“Lamentablemente Carrefour ha tergiversado la cadena de acontecimientos”, apunta el portavoz en el medio económico. “Ante la falta de acuerdo sobre un nuevo contrato, dejamos de suministrar a Carrefour a finales de año, algo que sabían que podía pasar. Esperamos poder acordar pronto los términos para que nuestros productos puedan volver a estar en sus estantes para que los consumidores los disfruten”.

En el mismo artículo, un portavoz de la cadena de supermercados refuta esta versión: “Nosotros, en el Grupo Carrefour, hemos tomado esta decisión”.

La guerra se libra también en España

Al margen de las declaraciones cruzadas, está claro que ambas compañías mantienen una guerra abierta a costa de los precios, que, además, tienen en España uno de sus grandes campos de batalla.

Carrefour es en nuestro país la segunda cadena de supermercados por cuota de mercado, con un 10%, solo superada por Mercadona, que tiene algo más del 25%.

Aunque la cadena que preside Juan Roig tuvo sus más y sus menos con Pepsico en el pasado, justo cuando la compañía está en guerra con su principal competidor ha anunciado una colaboración que va mucho más allá de un acuerdo de precios: la compañía estadounidense ha empezado a fabricar algunos de sus snacks de marca blanca, bajo la nueva enseña Munchos.

Como explican Víctor Olcina en Food Retail, Carrefour vive en Francia una situación similar a la que sufre en España. Allí es E. Leclerc su competidor directo y, al igual que Mercadona, su ventaja se ha ampliado en este contexto de inflación.

Estos malos números han llevado a Carrefour a cambiar su estrategia de compras después de que, en 2022, cancelara la alianza que mantenía con otras cadenas de supermercados (Tesco, Système U y Lous Delhaize) para hacer compras conjuntas. Su intención ahora es agrupar las compras de sus seis grandes mercados europeos: Francia, España, Italia, Bélgica, Polonia y Rumanía, cuyo volumen total de ventas representa cerca de 63.000 millones de euros.

Esta nueva central de compras, de nombre Eureca, está ubicada en Madrid y empezó a operar el pasado año, negociando a nivel europeo grandes paquetes de volúmenes y condiciones con las grandes multinacionales. Es en este contexto donde se han enturbiado las conversaciones con Pepsico, que no parece querer aceptar las condiciones de precios de la marca y que, según Olcina, se asemejarían más a los que sí está obteniendo Mercadona.

La guerra, de momento, no parece que vaya a detenerse. En España, de momento, aún se pueden encontrar los productos de Pepsico en los lineales, pero hay supermercados en los que ya empiezan a escasear. Si no se llega a un acuerdo en los próximos días es muy posible que, la semana que viene, ya no haya Lay´s, Pepsi o Kas en los supermercados de la cadena gala.

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