¿Sabes lo que es un finger food: La nueva tendencia de comer grandes platos en pequeñas dosis? Te cuento, finger food en castellano significa “comida que se come con los dedos”, si bien lo primero que piensas es que esto ya hace tiempo que existe, que es el clásico aperitivo antes de una boda o las tapas que te ofrecen en un bar.
Pues no, los finger food no son exactamente tapas, ya que para tomar tapas nos vamos de bares con los amigos, y tampoco es un aperitivo, el típico y simple tentempié que tomamos antes de la comida o cena.
La filosofía del finger food va mucho más allá, es el arte de combinar lo chic y lo informal, lo gourmet y lo práctico, lo delicado y lo divertido. Son un conjunto de recetas de cocina tradicionales o actuales presentadas en pequeños bocados individuales con un toque vanguardista, que conforman un menú con sus entrantes, platos principales y postres, todos ellos dispuestos en un bufé donde cada uno se sirve lo que quiere.
Es un concepto de comida más bien informal y distendida, como un cóctel, donde los invitados están de pie y pueden sociabilizar con todo el mundo, mientras te sirves bebida y comida a tu gusto, sin necesidad de cubiertos ni mesas para los asistentes.
La clave de los finger food es conseguir sintetizar un plato con todos sus sabores concentrados en tan solo un bocado. La idea es que este pueda ser fácilmente tomado con los dedos y llevado a la boca, sin mayores complicaciones.
En un bufé de este tipo es importante la diversidad de platos, de texturas, sabores y presentaciones. Para elaborar cada receta es vital tener en cuenta la filosofía de los cinco sentidos, que consiste en que sea atractivo para todos los sentidos: la vista, olfato, gusto, tacto, y oído.
Además de sabrosos, que sean visualmente atractivos y muy creativos, la presentación es clave, juega con colores, texturas y sabores. Consigue sorprender a tus invitados, sabores espectaculares, aromas deliciosos, que en boca sea agradable y con texturas apetitosas, crujientes, cremosos, espumas....
El bufé finger food te ofrece varias ventajas, su atractiva presentación lo convierte en algo goloso y muy apetitoso para los invitados, ahorras tiempo y energía al ser confecciones miniatura, los tiempo de cocción son mucho más cortos y además podrás añadir una gran variedad de platos en el menú, para todos los gustos, incluso platos saludables y bajos en calorías.
Como no podemos servir los platos excesivamente calientes, nos da la posibilidad de poder preparar y cocinar todos los platos con antelación, de esta manera te olvidas de la cocina durante todo el evento.
Una de las cosas que se debe tener en cuenta en una celebración con un bufé de finger foods es el entorno. De la misma manera que cuidas los platos, cuida también la decoración y la iluminación.
La puesta en escena debe ser al estilo bufé, con una mesa para que los invitados puedan rodearla. Los recipientes deben ser los adecuados para cada plato, que sean lo máximo de cómodos posibles para el comensal, recuerda que está de pie y lleva una copa y una servilleta en la mano. Y al final de la velada sirve los postres, para marcar un orden.
También se pueden repartir los alimentos en distintas mesas para que los invitados no se aglomeren en un solo espacio. Pon un bufé a parte para la bebida, y no te olvides de las servilletas es un básico, esparce servilletas por todas las mesas.
Si tu intención es hacer un cóctel por la tarde donde reúnes amigos antes de cenar calcula poner entre 5 y 7 platos por persona. Pero si lo que quieres hacer es una comida ligera, lo más recomendable es elaborar un menú de entre 8 y 10 platos por comensal.
Y si lo que te apetece es hacer una comida completa, lo mejor es elaborar entre 15 y 20 platos variados en un menú equilibrado en el que empiezas por los entrantes, continúas por los pescados, carnes y acabas con los postres.
Hay infinidad de modalidades de presentar los finger foods, desde cremas, espumas y ensaladas en pequeños vasos. La comida en palo, como brochetas de marisco en tempura, de carne en salsa, pinchos de verduras o pescado con aliños y espumas originales donde mojar.
Otra opción es presentar estofados en mini cocottes o cazuelitas, como un salmón teriyaki, thai chicken o un risotto. Todo tipo de pequeños sándwiches fríos y calientes, hamburguesas, siempre y cuando sean originales y sofisticadas.
Una de las presentaciones más innovadoras es presentar la comida en unas cucharas de diseño, en las que podrás poner desde un bocado de pulpo a la gallega, un arroz negro, unos calamares con mayonesa, lo que se te ocurra.
Y por último, pero no menos importante, la comida servida en cuencos o vasos altos, en los que pondrás los fingers de calabaza con parmesano, chips de frutas, barritas de queso con romero, verdura crujiente con trufa o ajo negro,... Los cuales se servirá cada comensal con los dedos. Sobretodo se original con la vajilla, usa papelinas, latas, cucuruchos comestibles, todo lo que se te pase por la cabeza.
No nos olvidemos de los postres, al servir tantos platos tienes la posibilidad de ofrecer entre dos o tres platos de postres, uno más refrescante, sano y menos calórico como una brocheta de frutas con chocolate. Otro podría ser un clásico, algo que siempre funciona, como un postre de chocolate y finalmente algo de repostería creativa y ligera, un mini lemon pie o tarta de queso con frambuesa servido en vaso.
En definitiva el bufé de finger foods es un nuevo concepto de gastronomía que propone disfrutar de la comida con menos formalismos y más creatividad, y con mucho sabor. No té lo pierdas, recuerda que en lo concentrado está lo mejor.
Cocina en pequeñas dosis. No te pierdas nuestras recetas
En este espacio seguiremos la filosofía del poder concentrado en pequeñas dosis y te vamos a presentar una serie de recetas _en pequeñas dosis_ para sorprender a tus amigos.