El té es un producto natural generado a partir de una planta, la Camelia Sinensis, que se cultiva fundamentalmente en China, y la Camelia Assamica, que proviene de la región de Assam, en India. Después del agua, el té es la bebida más consumida a nivel mundial, ya sea en su variedad blanco, negro, verde, oolong o pu-erh (también conocido como é rojo).
El té pu-erh, proveniente de la provincia china de Yunnan, es uno de los tés más famosos. Durante años fue consumido única y exclusivamente por la nobleza, pero, en la actualidad, se ha popularizado enormemente debido a su historia y a su sabor, aroma y valor nutricional. Veamos qué es el té pu-er, qué lo hace tan especial y por qué los expertos llegan a pagar tanto dinero por el.
¿Qué es el té pu-erh?
Las hojas del té pu-erh se obtienen de los árboles que crecen junto al río Lancang, que atraviesa varios estados del sur oeste de China. Cada zona tiene un suelo y clima diferentes, que otorgan a las hojas de té unos matices propios y diferenciales. Las cosechas de hojas de té se trasladan, por vía fluvial, a la ciudad de Pu-erh, donde se lleva a cabo su tratamiento siguiendo tradiciones milenarias.
El té pu-erh se comercializa en dos formatos diferentes: hojas sueltas y hojas comprimidas.
El pu-erh de hojas sueltas, para cuya elaboración se mezclan hojas de distintas procedencias y de fermentación rápida, tiene mucha demanda por parte del sector de la restauración, así como por parte de coleccionistas y reconocidos bebedores de té.
El pu-erh de hojas comprimidas es de fermentación más lenta y sólo se diferencia del anterior en la presentación. La compresión otorga al té pu-erh una variedad de curiosas formas que dan lugar a distintos nombre: té de Disco, té de Cuenco, té Ladrillo, té Rectangular, té Cuadrado, té de Seta y té Melón Dorado.
¿Qué hace del té pu-erh un té tan especial?
Al contrario de lo que muchos piensan, el formato en que se presenta el té pu-erh no determina su sabor. Hay excelentes tés pu-erh de hojas sueltas y también de hojas comprimidas. Los factores principales que, durante el proceso de producción, afectan al desarrollo de los micro-organismos en las hojas del té y, consecuentemente, a la fermentación y a su sabor, son la ventilación, la temperatura, la humedad y la luz.
Las hojas de te bien ventiladas, expuestas a una correcta circulación del aire, fermentan mejor y garantizan la reproducción saludable de micro-organismos, creando los matices aromáticos característicos del té pu-erh. Por el contrario, la falta de circulación del aire alrededor de las hojas de té conllevan una reducción en su sabor y aroma.
Para que los micro-organismos que otorgan al té pu-erh sus apreciadas características se reproduzcan de forma óptima, la temperatura ambiente ha de ser estable y mantenerse entre los 20º y los 30º C. Lo mismo ocurre con la humedad del ambiente, que conviene controlar para evitar la sequedad de las hojas o el desarrollo de moho, así como con la luz. Esta última ralentiza el crecimiento de micro-organismos, por lo que lo adecuado controlarla.
¿Por qué se paga tanto por el té pu-erh?
El proceso de fermentación de esta variedad de té es lento y largo, puede llegar a durar hasta 60 años y desde un mínimo de 2 años. Su almacenaje en barricas de bambú es lo que confiere a las hojas el color cobrizo que, al infusionar en agua caliente, se torna rojo. Con el té pu-erh hay añadas o cosechas de diferentes calidades. Los conocedores del pu-erh buscan paquetes de té bien añejado y cuidado en su proceso de producción.
Aunque hay bebedores de té que prefieren una taza de Pu-erh joven, de matices similares al té verde, el sabor del té pu-erh mejora con el paso del tiempo, tal y como ocurre con los vinos de crianza o con los licores añejos. El té pu-erh añejo es altamente apreciado y valorado, llegando a pagarse por el cantidades desorbitadas de dinero. 680 euros por gramo, como ocurrió hace tan sólo dos años en esta subasta de té chino.
Las propiedades que se le atribuyen también juegan un papel en el precio del té pu-erh. De el se puede decir que ayuda a reducir los niveles de azúcar en sangre, es depurativo, refuerza el sistema inmunológico, previene enfermedades respiratorias y cardiacas, estimula la digestión de comidas ricas, previene y reduce el colesterol, entre otros beneficios.
¿Qué podemos hacer para mantener nuestro té pu-erh en perfectas condiciones?
Además de los factores anteriores, que se escapan del control del consumidor final, hay una serie de consideraciones a tener en cuenta a la hora de mantener el té pu-erh en perfectas condiciones. Tenemos nuestro té, que nos ha costado lo suyo, así que toca mimarlo para garantizar el máximo disfrute en cada taza de té que preparemos con el.
Como ocurre con la mayoría de tés chinos, el té pu-erh está elaborado con hojas enteras (y no rotas como ocurre con los tés hindúes). A la hora de romper un paquete de té pu-erh comprimido es importante ser cuidadoso para no desgarrar las hojas de té, puesto que esto afecta al sabor del mismo otorgándole un sabor amargo.
Igualmente, no conviene extraer más cantidad de hojas de la necesaria para la elaboración de una taza de té pu-erh. Así se evita que el proceso de fermentación de acelere y el paquete de té comprimido se eche a perder.
Por último, usar el recipiente adecuado para su almacenaje es esencial. Cuanto más hermético sea y menos humedad contenga, mejor. Una bolsa de papel o una caja de cartón son buenas y baratas solucione, aunque lo más adecuado es un recipiente de barro. Este material permite que el té respire y que el aire circule lentamente, al tiempo que regula la humedad y los cambios de temperatura.
Imágenes | Scott MacLeod Liddle, Morgann, Brian.ch, Franx', Bindalfrodo y Daniel Go en Flickr
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