Mimar el servicio de un preciado caldo es fundamental, hay que tratar al vino como si de una obra de arte se tratara, este estilo proporcionará en nuestra mesa un toque de elegancia y distinción. Tan sólo hay que seguir una serie de consejos muy fáciles para que con tu modo de proceder, los comensales se sientan impresionados y valoren adecuadamente la botella de vino que proporcionas para disfrutar con la rica comida. Es un verdadero arte descorchar y servir un buen vino.
Todo es importante, incluso el mantel, preferentemente es ideal que sea blanco ya que contrasta con el color del vino y los platos que se encuentran presentados con el colorido de la comida.
Las copas deben de ser ligeramente cerradas en su parte superior, de esta manera se consigue que una vez que escanciemos en ellas el vino, los aromas se concentren mucho mejor. El color de las copas también es muy importante, éstas deben presentarse incoloras para que podamos apreciar el majestuoso color del vino. Ahora viene el ritual del descorche, debemos manipular la botella en ausencia de movimientos bruscos para evitar que se remuevan los posibles posos que se encuentran en ocasiones depositados en el fondo de la botella.
Las botellas de vino poseen una cápsula que cubre el cuello de la botella, lo ideal si se quiere hacer con elegancia, es utilizar un corta cápsulas adecuado para tal efecto, aunque en su defecto puedes utilizar un cuchillo afilado o el propio sacacorchos siempre con elegancia y evitando romperlo de una manera brusca.
Pasamos a la acción del descorche, un buen sacacorchos facilitará una tarea perfecta, en el mercado podemos encontrar una amplia gama de ellos, muchos muy adecuados para tal efecto. Hay que descorchar con tranquilidad, nunca con prisas y siempre con cuidado evitando no sobrepasar el tapón por completo, ya que pueden caer en el interior de la botella restos de corcho.
Si esto sucediera, nada mejor que escanciar las primeras gotas de vino en otra copa para que salgan al exterior los restos del corcho, aunque también puedes disponer de un pescador de tapones. Ofrecer la primera copa de vino al anfitrión y esperar la aprobación de la cata es uno de los ritos que suelen realizarse en el mundo del vino, seguidamente, se debe servir primero a las mujeres como muestra de galantería y de buen hacer.
Bueno, esto es un pequeño resumen, también podríamos hablar del decantado o la importancia del responsable de la mesa, pero estos son otros temas que comentaremos en otra ocasión. Disfrutar de un buen vino es sin duda todo un arte .
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