Hace ya unos días que nuestro amigo Sobrevino nos recomendó esta garnacha navarra de nombre curioso: Jardín de Lúculo.
El nombre rememora los jardines de la fastuosa villa que Lucio Licinio Luculo (118-56 A.C.) mandó construir en Roma tras sus años de militar y político. En ellos Lúculo, hastiado de la política, buscó consuelo en las artes y en las satisfacciones del ocio.
Sus grandes banquetes fueron, y siguen siendo, prototipo de fastuosidad, lujo, exquisitez y derroche. Aún así, Lúculo fue un hombre de vasta cultura, amante de las letras, de las artes y de la gastronomía.
Aún se conservan parte de estos jardines en la actual Villa Borghese.
Pero nosotros a lo nuestro: Jardín de Lúculo 2005
Un vino que en la contraetiqueta nos promete: "En el jardín de Lúculo, entre viejas garnachas, encontramos lilas, naranjas, violetas, cerezas, sensuales ninfas y descarados faunos. Tras soñar durante cinco meses en barrica llega el momento de vivir, disfrutar."
Pues sí, en nariz encontramos las cerezas y las flores azules: lilas, violetas. También la piel de naranja y el café torrefacto. En boca es un caramelito de cerezas, con una acidez muy bien integrada y un final suave y refrescante. Nada de amargores. Otro buen ejemplo de una utilización racional de la barrica y a la par, de las magníficas posibilidades de esta sensual ninfa: la garnacha navarra.
Sólo me queda una duda: ¿Y los descarados faunos?
Jardín de Lúculo 2005
Denominación: D.O. Navarra / Navarra / España Variedades: 100% Garnacha Graduación: 13% Alc. Precio: 7-9 euros Puntuación: 8
Vía | Sobrevino En Directo al Paladar | Ensalada de lentejas con pepino En Directo al Paladar | Coca de recapte