La sociedad vinícola La Rioja Alta es una de las bodegas que a finales del sligo XIX se establecieron el el famoso Barrio de la Estación de Haro, en el corazón de la Rioja.
Pero no es hasta 1941 que la casa registra la marca más vendida hasta hoy en día de su producción: el Viña Ardanza.
Ustedes lo conocen, estoy seguro de ello. No les voy a descubrir nada nuevo. Sí señores (y señoras), nada nuevo. Y es que a veces uno prefiere que las cosas sigan como están.
O almenos que cambien poco.
Para ello, la bodega La Rioja Alta dispone de dos nucleos centrales: la vieja bodega en el barrio de la estación de Haro, en la que realiza la crianza de sus vinos estrella; y las modernas instalaciones en Labastida donde disponen de la mejor tecnología para efectuar la recepción de la vendimia y las fermentaciones.
Los viñedos se hallan repartidos entre las 473 hectáreas de terreno que la bodega dispone en diferentes poblaciones de la Rioja Alta (Rodezno, Labastida, Briones, Cenicero, Fuenmayor) plantadas en su mayoría con Tempranillo y algo de Graciano.
Además la bodega también dispone una finca en Tudelilla, en la Rioja Baja, donde cultiva su Garnacha, variedad imprescindible para su Viña Ardanza.
Así es, este Viña Ardanza Reserva 2000 que les comentamos hoy, lleva una generosa parte de esa garnacha de Tudelilla, un 20%, más un cuerpo central de tempranillo de su finca Viña Ardanza en la población de Fuenmayor. Viñas viejas de tempranillo, recolección a principios de octubre, fermentación en inox y crianza de 36 meses en barrica de roble americano de 4 años de edad media.
Todo ello para ofrecernos un vino fino de la Rioja. De brillante color rubí de capa media, virando a teja en el ribete. Con una nariz al inicio muy marcada por los terciarios: anisados, pétalos de rosa seca, té. Con el aire, el fondo de frutilla roja se va haciendo evidente. Cerecitas, frambuesas, van asomando timidamente. En boca fresco, con una excelente acidez, carnoso y con esa dulcedumbre del roble americano usado, tan típica de estos lares. En retronasal de nuevo la fruta roja. Sin astringencias, ni amargores. Largo y elegante. Un vino que consigue año tras año estar a la altura de lo que se espera de él.
Servido un poco fresco, a unos 15ºC, y con cierta aireación previa, ha acompañado con alegría este "Pollo al horno con puré de patatas y trufa". Perfecto. Ese era su cometido.
La Rioja Alta, Viña Ardanza Reserva 2000
Zona: DOC Rioja / Haro / La Rioja Alta Variedades: 80% Tempranillo, 20 % Garnacha Graduación: 13% Alc. Precio: 20 euros Puntuación: 8,2
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