Hoy se retoman las negociaciones con el propósito de reformar el mercado del vino europeo, la última noticia que teníamos era la intención de arrancar 200.000 hectáreas de viñedo para evitar la superproducción de vino en la comunidad europea, también que pretendían liberalizar el cultivo del viñedo, de esta manera se pondría fin a los derechos de plantación, además querían cambiar el método utilizado para repartir los fondos y ayudas que se destinan al sector enológico entre otros.
La Comunidad Europea propone que el arranque sea voluntario y para ello se ofrecerán incentivos convincentes, especialmente en aquellas zonas cuya producción resulta menos competitiva. Es como si se les cortaran las alas a aquellos que intentan encontrar un hueco en el mercado enológico y que por el momento no destacan o no son competitivos, pero seguramente mantienen la pasión enológica.
Las ayudas, en principio, se sitúan en torno a los 7.000 euros por hectárea arrancada y se establece un plazo de unos 5 años para lograr el objetivo marcado, o sea, el arranque de 200.000 hectáreas equivalentes al 6% de los viñedos europeos.
En cuanto a las ayudas que suele proporcionar la Unión Europea a los viticultores, el método varía, ahora pretenden proporcionar los llamados “sobres nacionales”, cantidad económica que se proporciona al gobierno de cada país, siendo repartidos según su criterio, destinando siempre una parte que servirá para la promoción. Este va a ser un tema especialmente conflictivo como siempre sucede cuando se trata de decidir quién debe recibir las ayudas y la cuantía de éstas.
Varios son los temas que se van a abordar, como prohibir el añadido de azúcares al vino, algo que hacen otros países como Alemania, Austria, etc., para mejorar la calidad y la graduación alcohólica. Estos países no están de acuerdo con esta medida, ¿han tenido en cuenta que el cambio climático les favorece?, cada vez necesitan menos añadir azúcares, pues la uva alcanza la maduración óptima.
En fin, como en las reuniones pasadas, será difícil conseguir el consenso de los países participantes, aunque en nuestra opinión es más importante el consenso de los agricultores, ya que en ocasiones, lo que solicita un gobierno no coincide con las exigencias de quienes se encuentran en el mundo enológico.
Vía | Terra En Directo al paladar | La nueva reforma del sector del vino en Europa, ¿errónea? En Directo al paladar | La Comisión Europea propone arrancar 400.000 hectáreas de viñedo En Directo al paladar | El vino aumenta su graduación alcohólica debido a la subida de las temperaturas