Los dos principales consejos reguladores de vinos españoles han publicado sus conclusiones sobre la vendimia de este año que, pese a tener menor volumen que la de la pasada temporada, ha traído una uva de mejor calidad.
El año iba de lujo, pero las extraordinarias condiciones meteorológicas de finales de septiembre, con precipitaciones abundantes que además vinieron acompañadas de un ascenso de temperaturas, hicieron peligrar la vendimia. Los desvelos de los bodegueros ante las lluvias que dificultaban las labores de vendimia fueron, no obstante, disipados y la uva recogida ha acabado siendo de primera calidad.
En Ribera del Duero hablan ya de añada “histórica”, pues las uvas recogidas son de escaso tamaño, pero de maduración perfecta, lo que augura unos vinos muy bien vestidos, con un profundo color.
En Rioja tampoco ahorran elogio para unos racimos que, al igual que ha ocurrido en la ribera del Duero, son menos compactos y tienen uvas de menor tamaño, “todo ello, clave a la hora de garantizar la máxima calidad”.
“Aunque aún es pronto para avanzar resultados, tenemos grandes esperanzas en la cosecha que podría ser recordada como un año memorable para la historia del vino de Rioja” resume Pablo Franco, director del Órgano de Control de la Denominación.
Los blancos de Ribera, principal novedad
En Ribera del Duero se han recogido un total de 96 millones de kilos de uva, una cifra bastante alejada de los 125 millones recogidos en 2018. Por primera vez, además, se han recogido 600.000 kilos de uva albilla mayor, con los que se elaborarán los primeros vinos blancos amparados por la DO en sus 37 años de historia.
En Rioja la cantidad recolectada en la cosecha de 2019 en la Denominación de Origen Calificada Rioja se situaría en torno a 385 millones de kg de uva (187 millones de kilos habrían entrado en bodega en la zona de Rioja Alta, 109 en Rioja Oriental y 89 en Rioja Alavesa) de los que 342 serían de uva tinta y 43 de uva blanca.
Los primeros descubes confirman, además, las previsiones. “La buena estructura que presentan junto con su buenísima definición aromática contribuyen a pensar en que son vinos con un buen potencial para envejecer por lo que podemos afirmar que los vinos de este año prometen”, subrayan desde el órgano de Control que, en especial, destacan el equilibrio entre ph, acidez y alcohol, a pesar de que los últimos días de vendimia, por las altas temperaturas, la maduración acelerara y remontara algo el grado alcohólico.
Por su parte, los técnicos de Ribera del Duero hablan de “vinos frescos y elegantes, con una nariz muy expresiva y gran equilibrio en boca, destacando especialmente lo aterciopielado de sus taninos”.
Obviamente, los consejos no van a enviar notas de prensa hablando de que los vinos de este año son imbebibles, pero aunque moderemos su entusiasmo, no cabe duda de que este año depara unos vinos que nos darán muchas alegrías.
Imágenes | Ribera del Duero/Rioja
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