Todos conocemos el vinagre tradicional que se emplea en el aliño de ensaladas u otras comidas. Pero exiten muchos más. Entre todos ellos, el vinagre de manzana destaca por ser completamente natural. No tiene colorantes ni edulcorantes artificiales, ni ningún tipo de conservante químico. Si además quieres darle un toque personal al vinagre, puedes hacerlo especiado.
La ciencia recomienda ingerir este tipo de vinagre ya que es una manera cómoda de ingerir potasio cuya carencia, como sabemos, nos hace sentir sensación de agotamiento, sobre todo por las mañanas.
Igual que el potasio da fuerza a una semilla para convertirse en planta y flor, también da vida a los hombres y animales.
Para tratamientos adelgazantes es bueno beber diariamente un vaso de agua con dos cucharaditas de vinagre de manzana. Si tienes dolor de garganta, haz gárgaras con el remedio anterior. Para la artritis bebe un vaso de agua con dos cucharadas de vinagre de manzana en cada comida.
Para las varices puedes utilizarlo a modo de solución balsámica dándote un masaje con él. En estética tiene un efecto refrescante sobre la piel ya que estira y al mismo tiempo la deja lisa y suave.
No lo dudes y pruébalo, ganarás en salud y bienestar.