Un ciudadano va tranquilamente al supermercado con su lista de la compra: harina, huevos, sal, mantequilla... No, mantequilla no hay. Ni en ese ni en otros supermercados.
Pues esto es lo que están viviendo nuestros vecinos franceses, con un problema de desabastecimiento del manjar lácteo que está haciendo temblar los cimientos de su repostería. Peligran los deliciosos croissants y la bollería típica de Navidad.
¿A qué se debe esta escasez de mantequilla? Y sobre todo: ¿puede extenderse el desabastecimiento hasta el punto de ver las estanterías de nuestros supermercados vacías? Os lo contamos.
¿Qué ha pasado con la mantequilla?
La desaparición de las tarrinas de mantequilla en los lineales de los supermercados franceses es algo insólito en el país y los medios galos hablan del "mayor problema de abastecimiento desde la Segunda Guerra Mundial".
Pero no es un problema aislado: ya desde el pasado agosto, los empresarios lácteos del norte de Europa advertían que los precios de la leche en el viejo continente podrían subir en los próximos meses y que la campaña de Navidad -con sus dulces esponjosos y recetas con mantequilla- podría peligrar por la escasez.
Y esta situación, a su vez, no es solo europea, sino que deriva de la tendencia global -empezando por Estados Unidos- de sustituir las margarinas elaboradas con aceites vegetales hidrogenados por mantequilla, más saludable en consumo moderado.
El desabastecimiento se produce porque el mercado no estaba preparado o no vio venir la subida de la demanda de mantequilla y la escasez en la producción en la grasa láctea necesaria para su elaboración.
¿De dónde viene el desequilibrio?
Habría que retroceder a 2015, cuando se dio una sobreproducción de leche: los precios se desplomaron y la industria lechera se vio obligada a detener o ralentizar su producción para no tener pérdidas. O bien se reconvirtió para destinarla a otros productos lácteos más rentables.
Por otra parte, las malas condiciones climáticas, con un año especialmente caluroso, tampoco han beneficiado la producción de forraje necesario para alimentar correctamente a las vacas lecheras.
Pero esto por sí solo no explicaría la subida extraordinaria de la cotización de la mantequilla: de 2.500 euros por tonelada en 2016 se ha pasado a 6.000 euros ahora, según detalla La Depeche.
Además, entra en juego también el gigante asiático... con una compra salvaje de leche europea, especialmente francesa, que vio en Asia la gallina de los huevos de oro y destinó a este mercado gran parte de su producción.
Solo entre enero y agosto de 2016 aumentaron las exportaciones de leche y crema en un 323%, queso en un 115% y mantequilla en un 46%, explica La Tribune.
A todo ello se suma una serie de intereses económicos y empresariales enfrentados, entre los productores lácteos, los fabricantes de mantequilla y las grandes cadenas de distribución alimentaria. En Francia ya hablan de #BeurreGate y especulación con los precios.
Los fabricantes mayoristas de mantequilla han trasladado la escasez del producto a los precios a granel. Pero los distribuidores -como los supermercados- no han querido trasladar ese sobrecoste al consumidor, argumentando que sus precios se negociaron a principios de año, antes de la crisis.
Esto hizo que muchas reposterías francesas se vieran obligadas a comprar su ingrediente esencial en los supermercados antes que a los mayoristas. Y estos a su vez presionaron dejando de vender a los supermercados, que se quedan vacíos, para vender al exterior o a otros compradores que acepten los precios.
De hecho, si buscamos "pénurie de #beurre" (escasez de mantequilla) en redes sociales, las teorías conspirativas se multiplican a la misma velocidad que va descendiendo el número de tarrinas en los estantes.
Sin olvidar el impagable sentido del humor francés con mensajes tipo "Vendo medio trozo de #mantequilla a la sal de Guérande, 150 euros negociables. Interesados contactar por mensaje privado. Solo ofertas serias". Se abre la veda a un irónico mercado negro del untable, a precios desorbitados.
¿Puede llegar la escasez de mantequilla a España?
Según los expertos, el desabastecimiento no se solucionará antes de la primavera de 2018, así que restaurantes y pastelerías francesas están haciendo acopio de su ingrediente esencial para recetas y repostería navideña.
La Federación Nacional de Industrias Lácteas (FENIL) en España no hay previsión de que suceda un fenómeno como este.
"Es cierto que se da esta asimetría entre los precios por primera vez en la historia. Pero estamos hablando de los precios a granel. Esa mantequilla a precios altos se emplea en la industria alimentaria y las reposterías, que sí han sufrido el aumento del coste.
Se ha hablado incluso de que en el Norte de Europa se ha dado el fenómeno de la "histeria de la mantequilla para Navidad", con restauradores y pasteleros haciendo acopio.
Pero el sistema de precios en España funciona de forma distinta a Francia, y en principio no llegaríamos a ver estanterías vacías", explica Luis Calabozo, Director General de la FENIL.
Aunque España no cocina con mantequilla con tanta frecuencia como el país galo, sí tenemos extraordinarias recetas elaboradas con este ingrediente y un capricho con tostada de vez en cuando, además de las excelentes reposterías del país.
¿Qué sucedería si, por el motivo que sea, la mantequilla desaparece de los estantes en los supermercados o quedan tarrinas, pero a precio de marisco?
Pues tampoco pasaría nada. Aquí os contábamos una deliciosa receta irlandesa para hacer mantequilla en casa y en este otro artículo os explicábamos cómo sustituir la mantequilla por aceite en recetas de repostería.
Imágenes | Pixabay
En Directo al Paladar | Cómo atemperar la mantequilla rápidamente. Trucos de cocina para ahorrar tiempo
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