Galicia y Asturias sufren grandes pérdidas por la merma de castañas de este año, por lo que están mirando con ojo avizor la producción de El Bierzo y del norte de Portugal, pero el problema afecta a todo el territorio, son malos tiempos para las castañas.
Según las noticias, sólo en Ourense se calcula una merma de dos millones de kilos, lo que ya se puede apreciar en los precios que presenta el mercado. También se verá la repercusión en los productos que se elaboran con las castañas, como el marrón glacé, el puré de castañas, la castaña congelada para repostería, etc.
La cosecha de castañas ha sido perjudicada por la excesiva humedad, la falta de lluvia en septiembre y octubre, problemas de floración, bajas temperaturas en verano… todo esto es una prueba más de que el cambio climático está afectando a la alimentación. Mirad qué cifras, la recolección de castaña temprana se ha reducido este año en un 70%.
Más cosas negativas, la calidad de la castaña todavía está por ver, va con un retraso aproximado de dos semanas y de momento ya se ha podido apreciar que en algunos casos el tamaño de este fruto silvestre es inferior al habitual.
Un tema que ya se puso sobre la mesa y que seguramente se volverá a tratar, es el de considerar las castañas como producto ecológico dado que no reciben ningún tratamiento fitosanitario, o por el contrario, introducir un cambio de prácticas y hábitos que permitan asegurar la producción de castañas. ¿Qué te parece mejor?
Vía | El Mundo Más información | Faro de Vigo