Ocho ideas para aprovechar las claras de huevo sobrantes

Esther Clemente

Colaborador

Soy una chica coruñesa, veterinaria de profesión y que por circunstancias de la vida acabé viviendo en Asturias donde llevo ya una buena temporada. Cuando me preguntan por qué me gusta tanto cocinar, siempre respondo lo mismo: "¡Por qué mi madre odia meterse en la cocina!".

Si recientemente has preparado mayonesa, crema pastelera, flan o incluso lemon curd puede ser que te hayas encontrado con dos opciones, la primera guardar sin saber muy bien para qué unas cuantas claras de huevo y la segunda, opción que no te aconsejo, que las hayas tirado porque no sabías qué hacer con ellas.

Hoy te propongo ocho ideas para que esas claras nunca más vayan a la basura, unas más sencillas y clásicas como las lenguas de gato, y otras más complejas, eso lo decides tú, pero siempre con un resultado final delicioso para una preparación de aprovechamiento ¿quieres conocerlas?

Bizcochos

Los bizcochos no tienen porque siempre llevar yemas de huevo y ejemplo de ello es el famoso Angel Food Cake, este suave pastel que se denomina como “comida de ángeles” es originario de Norteamérica y se popularizó a finales del siglo XIX. Se trata de un bizcocho muy ligero, casi sin calorías y que se deshace en la boca.

Para elaborar la versión original tal y como se prepara en estados Unidos se necesitan pocos ingredientes, pero si un molde especial que no sea antiadherente y con un tubo central. Para aquellos que no dispongáis de él, en Directo al Paladar os hemos traído otras versiones de bizcochos con claras deliciosos y también muy sencillos, para los que además no necesitáis ningún molde especial.

Paulovas

Este postre elaborado con claras es de origen australiano y fue creado en honor a la bailarina rusa Anna Paulova en los años veinte. Su inventor buscaba elaborar un postre muy ligero, con mucho aire y con un punto de elegancia, así nació la paulova, un dulce que se acompaña por general con crema montada y fruta, y que resulta delicioso en porciones individuales para servir como broche de oro elegante en cualquier comida.

Aquí os dejo nuestras propuestas por si os animáis:

Mousses

Técnicamente una mousse es la dispersión de un gas en forma de burbujas en un líquido (mousse líquida) o un sólido (mousse sólida). En pastelería, las mousses se componen de frutas o chocolate, a la que se añaden huevo y nata para lograr una emulsión. Aunque muchas mousses llevan también yema, la proporción de claras siempre es mayor, por lo que nos vendrán genial las sobras. En Directo al Paladar os proponemos muchas opciones:

Tortillas y otras preparaciones de huevo

Tanto para el desayuno como para una cena ligera las tortillas preparadas exclusivamente con claras de huevo constituyen un aporte delicioso de proteínas de alto valor biológico y muy fáciles de asimilar por nuestro organismo. Ideales para deportistas y todos aquellos con valores altos de colesterol, pero que quieran disfrutar del huevo sin aportar grasa a su dieta. También necesitamos las claras para preparar estos huevos nube,

Macarons

Son el dulce de moda, caprichosos, dicen que es una de las elaboraciones más complicadas de la repostería, pero si sigues nuestros consejos para lograr unos macarons perfectos lograrás desmitificarlos.

Si te sientes todo un maestro pastelero comienza por preparar esta deliciosa receta que te proponemos:

Cócteles

Si quieres seguir las tendencias de moda nada mejor que tener alguna receta de cóctel a mano para preparar a tus amigos. Y si además tienes claras en la nevera es bueno que sepas que muchos de ellos se preparan con este ingrediente que le aporta textura y espuma a estas bebidas, aunque siempre es más conveniente para estas preparaciones el uso de claras pasteurizadas.

Desde el famoso Pink lady, un cóctel clásico que tiene un ligero rubor aportado por la granadina y que fue uno de las primeras "bebidas femeninas" y favorito de las damas de la alta sociedad de la década de los 30, hasta otras versiones con clara de huevo como el Pisco sour o el Gin Fizz.

Financiers

Estos pastelitos de origen francés que imitan pequeños lingotes de oro y que compraban los corredores de la Bolsa parisina como tentempié, se elaboran también con claras de huevo. De textura siempre muy suave, son fáciles de preparar y admiten múltiples sabores e ingredientes.

Para ir abriendo boca os dejamos algunas recetas con las que seguro triunfáis en vuestras meriendas:

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Merengues

Sencillos y muy vistosos, sobre todo si teñimos nuestras claras con colorantes alimentarios, son ideales como pequeños y dulces bocaditos para servir como acompañamiento de un té o un café.

También nos permiten preparar distintas formas para utilizar como adorno en nuestras tartas y postres. Se hornean a baja temperatura pues en realidad no necesitan nada más que un pequeño calor para secarse. Podéis empezar practicando a preparar estos delicados champiñones de merengue, ideales para por ejemplo un pastel infantil, o bien un tronco para las próximas fechas navideñas.

Estas han sido nuestras siete propuestas para aprovechar las claras de huevo sobrantes, pero si aún así te encuentras perezoso estos días para ponerte a cocinar, que sepas que las claras de huevo guardadas en un recipiente hermético congelan perfectamente y que así siempre tienes la opción de utilizarlas en otro momento.

Para ello siempre descongélalas poco a poco en la nevera y empléalas en preparaciones que se vayan de cocinar posteriormente. Seguro que tu tienes más propuestas para usar las claras sobrantes, nos gustaría que nos las contaras.

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