Vinagres Badia es una empresa familiar dedicada a la producción y venta de vinages. Fue fundada en 1908 en la población de Mollerusa (Lleida) por Agustí Badia y en la actualidad es regentada por sus descendientes.
Se caracteriza por ofrecer al mercado vinagres de alta calidad. Así es, en su linea de vinagres tradicionales se recuperó, ya a finales de los años 80, el método de acetificación Shützenbach.
No he encontrado en la red muchos datos sobre este proceso de acetificación pero parece ser que permite dotar al producto de aromas más finos y elegantes que otros métodos.
Además, con la colaboración de la Facultat de Enología de la Universidad Rovira i Virgili (URV) de Tarragona, apostaron por la investigación de nuevos procedimientos de elaboración, más sutiles y respetuosos con la materia prima, para el desarrollo de nuevos vinagres.
El resultado: el agridulce de Merlot y el de Riesling.
Nosotros nos centraremos en el de Riesling. El "Agridulce de vino Riesling", es un vinagre muy sutil, elaborado con vino de la variedad riesling importado desde la población alemana de Lonsheim, en el Rheinhessen. Un vinagre que se ha criado seis meses en botas de roble francés. En nariz nos recuerda con ligeras notas a la fruta que fue, con el acético bien presente, por supuesto, pero sutil y armonioso. Las notas de madera le dan complejidad y no molestan: canela, frutos secos. En boca es fino, con una buena acidez y un toque ligeramente dulce que me parece muy interesante.
Esta vez lo tomamos en casa con unas grandes setas de cardo. Cultivadas, claro. Crudas, laminadas y aliñadas con una vinagreta de este vinagre, aceite (AOVE), pimienta recién molida y sal de escama. Sencillo y delicioso...
Se puede encontrar en numerosos supermercados y, por supuesto, en tiendas especializadas.
Precio: 6-7 euros
Más información | Vinagres Badia En Directo al Paladar | Vinagre de Módena, conocer el auténtico