Si pides una cerveza en cualquiera de las terrazas de la Rambla de las Flores de Barcelona, te vas a encontrar que se ha impuesto casi obligatoriamente el vaso de medio litro. Pedir una caña de cerveza se ha convertido en una tarea casi imposible, pides pero te ignoran y te sirven ½ litro, y pasa además con otras bebidas, agua, zumo, sangría, etc.
Esta conducta es atribuida a la comodidad, a esto le sumamos que son pocos los clientes que se quejan, el resultado es “La Dictadura del Medio Litro”. Puedes quejarte, pero tus palabras serán desoídas, como respuesta obtendrás silencio, lo gracioso es la contestación que proporcionan los camareros indicando que este proceder es parte de la política de empresa (medida para hacer frente al alquiler de los locales). Nosotros creíamos que la política de empresa, además de darle la razón al consumidor, era satisfacer sus deseos consumistas y en absoluto imponerlos.
Lo cierto es que los extranjeros agradecen que les sirvan la cerveza de ½ litro, casi se diría que han sido ellos quienes indirectamente han impuesto la medida . Remitiéndonos a los datos que proporciona el artículo de La Vanguardia, el 99% de los clientes son extranjeros y sólo el 1% son catalanes.
Disfrutar de ½ litro de cerveza en la Rambla de las Flores puede costar unos 8 euros, un precio realmente abusivo pero que muchos consideran adecuado, especialmente los turistas que están acostumbrados a pagar precios más elevados por el alcohol en sus respectivos países.
La noticia que nos proporciona la publicación digital La Vanguardia no es una novedad de este año, ya hace un par de años que muchas de las terrazas de la Rambla tienen esta conducta, nosotros la vivimos sorprendidos, pero ahora es ya generalizada. Es obligatorio ofrecer al consumidor lo que solicita, debemos beber lo que nos apetezca y en absoluto permitir este proceder.
Vía | La Vanguardia