Hace pocos días que conocíamos la noticia de que la mayoría de tomate utilizado por diversas empresas de todo el mundo para hacer salsas, concentrado de tomate o ketchup entre otras, proviene de China.
Ahora conocemos un nuevo procedimiento ilegal proveniente del país asiático, hace tres días la OLAF (Oficina europea para la Lucha Contra el Fraude) dio a conocer una práctica fraudulenta, la importación de ajos provenientes del sureste de Asia declarados como manzanas, lo que puede suponer un fraude de dos millones de euros para los contribuyentes de la UE.
La detección de la entrada ilegal de este producto se ha realizado gracias a la investigación de los servicios aduaneros de los 27 países comunitarios conocida como “operación wasabi”. La mosca tendrían detrás de la oreja, pero es que los chinos no paran, sin ir más lejos, en esta investigación se han detectado graves infracciones, como la introducción de productos alimentarios de origen animal no autorizados por cuestiones sanitarias.
A estas alturas todavía están muy verdes los controles de importación y sanitarios, afirman que es de obligada necesidad aumentar la comunicación entre aduanas, autoridades sanitarias y laboratorios de pruebas y análisis para evitar el fraude y la entrada de alimentos o productos insalubres. No es la primera vez que lo oímos, ni la segunda, pero todavía no se ha solucionado.
Vía | Adn Mundo