Como ya hemos comentado en Directo al Paladar, las grasas trans (resultado del proceso industrial conocido como hidrogenación) han sido prohibidas en algunos países europeos y en diversas ciudades estadounidenses, lo que ha llevado a los fabricantes de productos preparados y a restauradores, a echar mano de otro tipo de grasa, pero resulta que ésta también es perjudicial para la salud.
Según un estudio publicado en la revista Nutrition & Metabolism, elaborado por investigadores de la Universidad de Waltham, en Massachussets, el nuevo lípido utilizado, las grasas interesterificadas (obtenidas por modificación de su estructura glicerídica por reordenamiento molecular de los ácidos grasos sobre el glicerol) hacen descender el colesterol bueno (HDL) y eleva los niveles de azúcar en sangre.
Esta conclusión es fruto de la investigación realizada a 30 voluntarios sanos que fueron sometidos a tres tipos de dieta durante un mes. En ella se incluía un 30% de calorías en forma de grasas, entre las que se encontraban las saturadas naturales (aceite de coco), aceite de soja parcialmente hidrogenado y aceite de soja interesterificado. Los últimos mostraron un aumento de hasta un 20% en sus niveles de azúcar en sangre comparándolos con los que realizaron la dieta con el aceite de coco, así como un descenso en los niveles de colesterol HDL.
Los investigadores afirman que estas grasas ya han empezado a utilizarse en productos procesados reemplazando las grasas trans y no sabemos qué pensar, pues éstas pueden ser peores que las primeras, ¿es esto un atentado constante contra la salud pública?, ¿tienen miedo de que los hospitales se queden vacíos? Lo que está claro es que hay que estar a la orden del día con las noticias nutricionales y no perder de vista las etiquetas de los productos que vayamos a consumir.
Vía | El Mundo Más información | Nutrition & Metabolism En Directo al Paladar | Grasas trans, hay que eliminarlas En Directo al Paladar | Prohibir margarinas y aceites hidrogenados en bares y restaurantes