La idea es de los croatas de Bruketa & Zinic. Consiste en tener que hornear el libro en cuestión, durante 25 minutos para poder ver su contenido. Imágenes y recetas aparecerán sólo después de que seamos nosotros los que lo preparemos. La técnica la han llamado well done, bien hecho en castellano, y se trata de una tinta termoactiva que reacciona con el calor.
Aunque la idea en la práctica será difícil llevarla a cabo más allá del concepto de marketing, seguro que a Adrià o a Elzar se les ha ocurrido alguna receta ingeniosa.
Hablando de hornear, los compañeros de Decoesfera han publicado un interesante artículo sobre como ahorrar usando mejor el horno.
Vía | La no convencional