No todos pueden disfrutar libremente de unas finas y jugosas lonchas de jamón curado, las dietas en las que se restringe la sal, tienen muchas tentaciones que no pueden llevar a cabo. Con el fin de satisfacer a la población que debe mantener este tipo de dieta, el Instituto de Investigación y Tecnologías Agroalimentarias (Irta) de la Generalitat de Catalunya en Monells (Girona), ha producido jamón curado bajo en sal.
En la labor de investigación dentro del proyecto Truefood (Tradicional United Europe Food), formado por 42 instituciones de la UE para mejorar los alimentos tradicionales, estudian nuevas tecnologías que permitan obtener un jamón curado con la mitad de sal y manteniendo la seguridad alimentaria. Actualmente, por cada kilo de jamón se hallan entre 40 y 60 gramos de sal.
Para lograr su primera meta, han elegido la mejor materia prima intentando mejorar el proceso de salazón y de secado para que la calidad del producto sea impecable.
Una satisfacción para los paladares de las personas que deben mantener una dieta hiposódica y para la salud de los que todavía estamos sanos.