Una dieta que en algunos sectores se puso de moda es la dieta paleolítica, esta se basa en una dieta menos variada, como su nombre indica, los que comían nuestros antepasados muy lejanos, carnes de caza y los vegetales que encontraban. En esta dieta no entran ni los cereales ni los productos lácteos.
Conocemos un estudio realizado por científicos suecos dirigidos por Staffan Lindeberg de la Universidad de Lund, en Suecia, en el que sugieren que la dieta paleolítica puede resultar más beneficiosa que la mediterránea para las personas que padecen diabetes.
Es clara parte de la conclusión, los hidratos de carbono una vez convertidos en azúcar, afectan a los niveles de glucosa de los diabéticos.
29 voluntarios con diabetes fueron los que mostraron tales beneficios, 15 de ellos siguieron una dieta paleolítica durante tres meses, el resto disfrutaron de una dieta mediterránea. Tras las doce semanas que duró el estudio, el primer grupo redujo sus niveles de azúcar en un 26%, mientras que el grupo que realizó la dieta mediterránea, sólo mejoró su glucosa en un 7%.
Los diabéticos tienen prohibido el consumo de dulces, limitado el consumo de frutas, lácteos y carbohidratos, y permitidas las verduras, hortalizas, carnes y pescados. La idea está clara, estos pacientes llevan a cabo una dieta paleolítica pero con un poco de margen para no sacrificar su alimentación.
Vía | Maikelnai Más información | Science