Lo antiguo está de moda, y si no que se lo digan a la Marquesa de Parabere la cual seguro que no contaba en 1933 cuando publicó su enciclopedia culinaria "La cocina completa", que casi cien años después estaríamos reproduciendo sus recetas aquí en Directo al paladar. Hoy recordamos su cocina a través de esta receta incluida en el libro "Homenaje a la marquesa de Parabere" y del cual ya os hablamos hace unos días.
Lo cierto es que a pesar del paso del tiempo, todas sus recetas mantienen la frescura de esos platos que no te cansas de repetir, como el bizcocho savarina que os traemos hoy, un dulce perfecto para cualquier día de fiesta o una merienda especial, y que se compone de un bizcocho parecido al baba, hecho con masa de levadura y bañado con un almíbar aromatizado con licor.
Comenzaremos en un bol poniendo la harina, le hacemos un hueco en el centro y añadimos la leche tibia con la levadura disuelta. Añadimos los cuatro huevos batidos. Con la punta de los dedos vamos uniendo los ingredientes, cuando estén todos integrados, pasamos la mezcla a una encimera y comenzamos a amasar hasta conseguir una masa lisa y elástica. Dejamos levar 30 minutos a temperatura ambiente.
Pasado este tiempo le vamos añadiendo la mantequilla y la sal, seguimos trabajando la masa, proyectándola con fuerza sobre la encimera para que se vuelva elástica y cuando se estire una porción no rompa. Añadimos el azúcar vertiendo a la vez la leche en cucharadas y sobando mucho la masa. En este punto colocamos la masa en el molde bien engrasado, dejando 1/3 de la altura del molde sin masa pues al levar crece mucho. Dejamos fermentar hasta que casi llegue al borde del molde.
Precalentamos el horno a 180 grados, horneamos durante 40 minutos sin abrir el horno. Una vez cocido lo retiramos del horno y lo dejamos enfriar fuera del molde en una rejilla.
Para el baño, en una olla ponemos el agua y el azúcar, añadimos las tiras de limón o de naranja y lo llevamos a ebullición. Retiramos del fuego y le añadimos el ron o el licor de naranja. Cuando esté aproximadamente a 60º centígrados bañamos el bizcocho ya frío echándole el sirope por encima con un cucharón de sopa. Lo dejamos escurrir bien y lo pasamos a un plato de presentación.
Con qué acompañar el bizcocho savarina de la marquesa de Parabere
Este bizcocho savarina de la marquesa de Parabere lo podemos decorar con nata montada y fruta fresca, sobre todo frutos rojos, que le contrastará muy bien con el dulzor del pastel. Si le echamos nata entonces lo mantendremos en nevera, en cambio, si lo consumimos solo, puede estar guardado durante dos días en una caja hermética a temperatura ambiente.