Una vez casi terminada la Navidad nos encontramos en muchos casos con que en casa quedan restos de excedentes navideños, bien porque no hemos calculado bien las compras o porque después de tanta saturación de comida nos resulta imposible terminar todas las preparaciones.
Para la bollería, en caso de que quede dando vueltas por la cocina, me gusta preparar este pudin, que es muy rico y jugoso y es ideal para aprovechar el panettone sobrante.
Podemos utilizar para esta versión de pudin de pan cualquier bollo navideño como Roscón de Reyes, Pandoro, Stollen...Mientras tengamos un ingrediente blando que absorba y empape bien los líquidos, podemos usar esta receta. Por lo tanto a diario cuando quede pan sobrante, así como madgalenas, croisant o napolitanas, por ejemplo, también podemos reutilizarlos de esta forma.
Troceamos el panettone en pedados irregulares y lo disponemos sobre una fuente con fondo. En un cazo aparte llevamos a ebullición la leche con la nata y la vaina de vainilla abierta. Reservamos. Precalentamos el horno a 180º calor arriba abajo.
Batimos las yemas y los huevos con el azúcar hasta que monten. Vertemos la mezcla de leche y el chocolate, suavemente, y muy poco a poco para evitar que se cuaje el huevo. Retiramos la vaina de vainilla.
Echamos el conjunto sobre el panettone y esperamos unos cinco o 10 minutos para que se empape bien del líquido. Cocemos al baño María durante unos 30 minutos o hasta que la masa haya cuajado y veamos la superficie crujiente. Retiramos del horno y servimos templado.
Con qué acompañar el pudin de panettone
El pudin de panettone se puede tomar tanto como postre como para desayunar o merendar junto al café, té o leche, ya que combina perfectamente en ambas situaciones. Debemos servirlo tibio que es cuando estará en su punto óptimo, muy jugoso. Podemos acompañarlo de crema ácida si nos gustan los contrastes dulce ácido.