Creo que ya podéis haberos dado cuenta de que los brownies me gustan bastante ya que hasta la fecha, y para el poco tiempo que llevo en Directo al Paladar, con esta receta de brownie de moca, son tres ya los que os he enseñado. Probablemente no sea el último, así que deseo que también os entusiasmen tanto o más que a nosotros.
La receta, aunque con algunas variaciones, pertenece al libro Deliciosos Brownies del que os hablé en otra ocasión. Como os dije, un libro que para el precio mínimo que tiene, merece la pena totalmente porque contiene recetas tan deliciosas como esta. Los brownies están mucho más ricos recién hechos, pero una vez frío, podéis meterlo en el micro unos segundos y gana mucho más que totalmente frío.
Precalentamos el horno a 180º con calor arriba abajo. Derretimos el chocolate junto a la mantequilla, dejamos templar. Mientras, en otro cuenco batimos los huevos con el azúcar hasta que esponje la mezcla. Incorporamos el chocolate, una vez se haya templado, la pizca de sal y el café. Mezclamos todo muy bien y agregamos las nueces picadas.
Echamos por último la harina y la levadura tamizadas. Lo unimos con cuidado y vertemos en un molde engrasado o forrado con papel de horno. Horneamos durante unos 30 minutos hasta que el brownie forme una costra crujiente en la superficie pero el interior esté todavía jugoso.
Sacamos del horno, dejamos enfriar en el molde unos minutos, desmoldamos y servimos cortado en porciones cuadradas. Se acompaña de helado o alguna salsa tal como explico en el apartado degustación.
Con qué acompañar el brownie de moca
El brownie de moca se puede tomar tal cual o acompañados de helado, pero también son perfectos para una merienda con un té o un café recién elaborado. Si queremos rizar el rizo y presentar un brownie todavía más delicioso, podemos hacer una salsa de vainilla o café con un poco de nata, chocolate blanco y vainilla o café, como prefiramos.