La asociación de ajo negro en elaboraciones dulces puede resultar dura de hacer y llevaros a pensar que no es más que una guarrindingada, como dice David de Jorge. Sin embargo, puedo aseguraros que no hay nada más lejos de la realidad. El ajo negro es un ingrediente cuyo sabor, ligeramente dulzón, recuerda al regaliz. Perfecto para incorporar a recetas dulces como estas pastas de té al ajo negro y naranja.
Esta inusual combinación es creación de Yolanda, cuyas invenciones son siempre garantía de éxito. Confieso que su receta de pastas de té al ajo negro y naranja me picó la curiosidad y que, al igual que me ocurrió cuando probée por primera vez el brownie de remolacha o la mousse cremosa de chocolate y aguacate, el resultado final me ha enamorado. La receta original ha sufrido ligeras modificaciones, pero la esencia es la misma y no puedo más que recomendaros el probarla.
En un recipiente hondo, mezclamos la manteca junto con el azúcar y batimos con unas varillas hasta que este último se haya disuelto en la grasa. Incorporamos el huevo y batimos de nuevo. A continuación, rallamos la naranja sobre la mezcla para que el aroma y el jugo caigan directamente sobre ella y el resultado sean unas pastas más aromáticas.
Tamizamos la harina y la agregamos junto con un pellizco de sal, removiendo con una espátula hasta incorporar. Hacemos un puré con los dientes de ajo negro aplastándolos con un tenedor y los agregamos a la masa. Nos aseguramos de mezclar bien y, cuando tengamos una pasta homogénea, la envolvemos en papel transparente dando forma de salchichón. Enfriamos en la nevera durante unas dos horas o hasta que endurezca.
Transcurrido ese tiempo, retiramos el papel transparente y cortamos la masa en discos con ayuda de un cuchillo bien afilado. Los colocamos sobre una bandeja de horno cubierta de papel sulfurizado y espolvoreamos con azúcar. Horneamos a 180ºC, con calor arriba y abajo, durante unos 12 minutos o hasta que los bordes comiencen a dorarse. Retiramos y enfriamos.
Con qué acompañar las pastas de té al ajo negro y naranja
Aunque, por tradición, el momento para unas pastas es el del café o infusión de media tarde, resulta difícil resistirse a meter mano a estas pastas de té al ajo negro y naranja a cualquier hora del día. El ajo negro aporta un sutil toque a regaliz que, junto con el punto a naranja, convierte estas pastas en un auténtico y sorprendente "bocatto di cardinale".
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