Chocolate y café son una de las combinaciones de ingredientes que mejor funcionan en la cocina. Lo hemos visto en la tarta de chocolate con un toque de café, en la mousse de chocolate negro y café, en el batido helado de chocolate y café y hoy ampliamos la lista con las trufas de licor de café. Suenan bien ¿verdad?, pues están incluso mejor. Mucho mejor.
El café de la sobremesa me suele pedir un bocado dulce con el que equilibrar su amargor y el sabor del chocolate es el que más me gusta para estas ocasiones. Si a vosotros también os pasa, probad a hacer estas trufas de licor de café. Un dulce que gana con los días, mejor hacerlas 48 horas antes y esperar a que alcancen su punto óptimo antes de hincarles el diente.
Llenamos de agua, hasta la mitad, una cacerola y la calentamos a fuego suave. Sobre ella colocamos un cuenco y en él metemos el chocolate cortado en trozos u onzas. Mientras esto ocurre, cortamos la mantequilla en pequeños trozos y, cuando el chocolate esté bien fundido, la agregamos y removemos hasta integrar.
Retiramos el cuenco del calor e incorporamos la nata líquida y el licor de café. Removemos con unas varillas metálicas para obtener una mezcla bien homogénea. Por último, agregamos las yemas y removemos de nuevo. Vertemos la ganache en un recipiente plano y amplio y lo dejamos atemperar antes de introducir en la nevera.
Una vez fría la mezcla, hacemos bolitas con ayuda de una cuchara y con las manos (que nos vamos a ensuciar mucho, así que mejor usar guantes - si tenemos). Esta masa se trabaja mucho mejor en frío, así que hay que procurar ser rápidos para que no pierda temperatura. Si esto ocurre, podemos meter la mezcla en el congelador unos minutos para que endurezca.
Terminamos las trufas rebozándolas en frutos secos triturados, cacao puro en polvo, coco rallado, fideos de chocolate, bolitas de azúcar o lo que más nos guste. Nosotros hemos utilizado coco rallado, almendra en granillo y avellanas tostadas y trituradas. Guardamos en frío durante 48 horas (si somos capaces) antes de servir a temperatura ambiente.
Con qué acompañar las trufas de licor de café
Aunque estas trufas de licor de café son perfectas para la sobremesa, se pueden servir como postre o en disfrutarlas en cualquier otro momento del día. Su sabor a licor de café es tan sutil que los niños también las podrán disfrutar. En caso de no tener licor de café, se puede usar ron, coñac, kirsch, amaretto, etc. Al gusto.
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