Si no nos gustara cocinar, Directo al Paladar no existiría, pero hasta nosotros nos cansamos en ocasiones de preparar la comida.
Por mucho que defendamos la importancia de la cocina diaria, no siempre hay tiempo para guisar, y está bien tener recursos para esos días en los que apetece preparar algo muy rápido y sentarse en el sofá.
Hemos preguntado a los editores de Directo al Paladar por sus recetas o recursos para solucionar comidas y cenas rápidas y, aunque sus respuestas son variadas, hay platos que se repiten.
Huevos, pasta, legumbres cocidas o arroz son los protagonistas del siguiente listado de recetas muy fáciles, que os explicamos, además, como simplificar, para tener la comida lista en 5 minutos, y sin apenas esfuerzo.
1. Sándwich mixto
El sándwich mixto, o bikini, como se conoce en Cataluña, es una cena que se prepara en cinco minutos y nunca defrauda. Y, aunque solemos asociarlo a un bocado de cafetería de última recurso, bien hecho es un plato más que digno. Se puede, además, tunear al gusto, yo suele añadirle algo de verde, salsa picante o mostaza y, si estoy menos perezoso, un poco de cebolla caramelizada. Pero en su versión más simple, con el queso bien fundido, me sigue encantando.
En primer lugar, calentamos una sarten a fuego medio. Mientras coge calor, montamos el sándwich, poniendo, por este orden, queso, jamón, queso. Untamos el exterior del sánwich con mantequilla y lo ponemos en la sartén. Con ayuda de una espátula, le damos la vuelta, hasta que ambas caras estén doradas y el queso bien fundido.
2. Macarrones con chorizo
Pakus suele tirar de uno de los platos más socorridos de la gastronomía española, que, bien hecho (y hasta mal) es una delicia. La receta se puede complicar con uno u otro añadido, pero con tener un chorizo y una salsa de tomate decente vamos que nos matamos. Nuestra receta de macarrones con chorizo es un poco más sofisticada, pero os dejamos aquí la versión "no pienso ponerme a picar cebolla".
Ingredientes para 4 personas: 400 g de macarrones, 200 g de chorizo, 250 g de salsa de tomate, sal, aceite de oliva, orégano, queso rallado.
Elaboración: calentamos agua en una olla grande con un poco de sal y cocinamos los macarrones al gusto. Mientras se cocinan, en una sarten gránde, sofreímos el chorizo cortado en trozos pequeños, hasta que quede tirando a crujiente. Añadimos las salsa de tomate, y removemos bien, dejamos que se cocine unos minutos a fuego suave hasta que la pasta este lista. La añadimos, dejamos que se cocine todo junto un minuto, echamos un poco de orégano y servimos con queso rallado al gusto.
3. Arroz blanco al microondas
"Desde que descubrí cómo hacer arroz blanco en el microondas, no lo he vuelto a preparar en cazuela", explica Carmen Tía Alia. "Lo suelo cocer mientras desayuno y queda listo para la comida. Cuando llega el momento de sentarse a la mesa solo me queda recalentarlo en salsa de tomate casera (suelo preparar mucha cantidad y la guardo en botes en la nevera para consumir a lo largo de la semana), frío unos huevos y a disfrutar".
Ingredientes para 2 personas: 600 ml de agua hirviendo, 1 cucharada de aceite de oliva, 250 g de arroz redondo, sal, 1 diente de ajo, perejil en polvo.
Elaboración: Comenzaremos hirviendo el agua en un cazo. Después ponemos el arroz, el aceite, la sal, el ajo y perejil en polvo en un bol resistente al microondas. Añadimos el agua hirviendo. Cubrimos el bol con film de cocina y lo pinchamos varias veces para hacerle como unos agujeros pequeños para que salga el vapor. Cocinamos a 800 W durante 6 minutos, luego a 600 W durante 8 minutos más. Retiramos del microondas, destapamos y dejamos atemperar un poco antes de servir.
4. Tostas de aguacate
Tanto María Llanos como Liliana Fuchs tienen siempre a mano aguacates para solucionar comidas rápidas. "Procuro tener varios en diferentes puntos de maduración para ir repartiéndolos a lo largo de la semana", explica Fuchs. "Los más maduros me gustan para montar tostas, pues siempre tengo pan fresco o rebanadas congeladas de masa madre casero. Para añadir proteína, suelo tirar de huevo duro, bacalao ahumado o salmón, o una lata de atún o bonito, y alguna hortaliza". A Llanos la que más le gusta es la de salmón ahumado, cuya receta os dejamos a continuación.
Ingredientes para 2 personas: 1 rebanada de pan de hogaza, 1 aguacate, 100 g de salmón ahumado, 1 huevo duro, cebollino fresco picado, alcaparras, sal, pimienta, aceite de oliva.
Elaboración: Cortamos el aguacate por la mitad, a lo largo, y retiramos el hueso. Pelamos y machacamos la carne den un cuenco. Podemos condimentar al gusto con sal, pimienta, aceite de oliva, etc o dejarlo tal cual. Tostamos las rebanadas de pan ligeramente y las cubrimos con una cantidad generosa de aguacate. Ponemos encima el salmón ahumado. Pelamos el huevo duro y picamos, por separado, la clara de la yema. Esparcimos por encima y decoramos con cebollino fresco picado. También podemos añadir alcaparras.
5. Salchichas al vino
No me cansaré de reivindicar las salchichas al vino, una tapa clásica de España, tan maltratada en los bares, como olvidada en las casas. Es una cena que me encanta y nunca me da pereza preparar, pues toda la dificultad reside en cortar una cebolla en juliana (si fuera en brunoise igual me lo pensaba).
Ingredientes para 2 personas: 1 cebolla, 6 salchichas frescas, 150 ml de vino blanco, dos cucharadas de aceite de oliva, sal, pimienta negra recién molida.
Elaboración: Pelamos la cebolla y la cortamos en juliana. Calentamos un poco de aceite de oliva virgen extra en una sartén y la pochamos a fuego muy suave durante unos 10 minutos. Si lo hacemos con la tapa puesta, la cebolla sudará más rápido por efecto del vapor y quedará muy jugosa. Salpimentamos al gusto, pero con prudencia pues el vino y las salchichas aportarán mucho sabor a plato. Una vez esté pochada la cebolla, incorporamos el vino y subimos el fuego. Dejamos que se evapore el alcohol durante un minuto o dos antes de incorporar las salchichas. Las volteamos para que se doren por todos lados, bajamos el fuego y dejamos cocer, con la sartén tapada, durante unos 25-30 minutos antes de retirar y servir.
6. Quesadillas
Somos varios los editores de Directo al Paladar que recurrimos a las quesadillas para solucionar una cena rápida. "Siempre tengo tortillas de trigo en la despensa y no hay semana que no caigan en forma de quesadillas o fajitas", explica Carmen Tía Alia. "Las quesadillas, mucho más rápidas, suelen ir rellenas de frijoles refritos y queso. Las fajitas llevan un pelín más de trabajo porque hay que saltear cebolla y pimiento (también tiras de pollo, para mi hijo que es el omnívoro de la familia), pero la cosa se hace soportable".
Son muchas las combinaciones de ingredientes que podemos usar en las quesadillas, pero os dejamos a continuación una de las más sencillas, de queso emental con aguacate.
Ingredientes para 2 personas: 4 tortillas de trigo, 1 aguacate maduro, 1 tomate grande, 2 cucharadas de cilantro freso, dos cucharaditas de salsa piante, zumo de medio limón, tres o cuatro cucharadas de queso emmental rallado, ajo granulado, pimienta negra molida, sal y aceite de oliva virgen extra.
Elaboración: Abrir el aguacate por la mitad, retirar el hueso y extraer la carne. Chafarla con un tenedor, aliñar con unas gotas de zumo de limón y salpimentar. Extenderla en dos de las quesadillas con ayuda de un cuchillo de mantequilla. Trocear el tomate retirando las semillas, en piezas pequeñas. Repartirlo encima del aguacate. Añadir perejil o cilantro picado y un poco de salsa picante al gusto. Culminar con el queso rallado y sazonar con ajo granulado y un toque extra de pimienta. Cubrir con las otras dos tortillas y presionar bien, con suavidad. Calentar un poco de aceite de oliva en una buena sartén antiadherente y cocinar una quesadilla cada vez a fuego medio. Calentar unos 5 minutos, vigilando que no se quemen, girar y dorar por el otro lado. Cortar en cuatro partes y servir con salsa al gusto.
7. Espagueti carbonara
Desde que nos dijeron que la pasta a la carbonara no se hacía con nata hemos cubierto a la receta original de cierta sofisticación infundada. En Italia, es un plato barato, que hace cualquier estudiante un domingo de resaca y se prepara en cuestión de minutos. El plato original se elabora con guanciale, un tipo de panceta difícil de encontrar en España, pero se puede hacer perfectamente con beicon o panceta al natural. En mi casa la hacemos siempre con panceta adobada de Soria y no tengo duda de que está mejor que con la que usan en Italia.
Ingredientes para 2 personas: 3 yemas de huevo, 100 g de panceta, 50 g de queso pecorino (o parmesano, más fácil de encontrar), sal, agua, 300 g de espaguetis.
Elaboración: Corta la panceta en trocitos de pequeño tamaño y fríelos hasta que comiencen a dorarse. Por otro lado bate las 3 yemas de huevo el queso pecorino recién rallado hasta hacer una mezcla algo espesa. Dale unos toques de pimienta negra a esa mezcla. Entre tanto, pon la pasta a cocer en agua abundante con sal, y sácala cuando falten un par de minutos para que esté al dente. En la sartén donde habíamos reservado la panceta o el guanciale salteado, agregaremos la pasta escurrida a la que añadimos la mezcla de huevos, queso y pimienta, mezclando bien. Agregamos también un cucharón del agua de cocción de la pasta. Removemos mientras se van integrando los distintos ingredientes y se va haciendo una especie de salsa al cuajar ligeramente el huevo con el caldo caliente de la cocción. Servimos espolvoreando de un poco más de pecorino rallado y dando un par de vueltas más de pimienta molida.
8. Ensaladilla rusa
Como apunta Jaime de las Heras, la ensaladilla "es un remedio rápido y fresco, sobre todo cuando vas justo de tiempo y hace calor". Además, explica, permite el aderezo o los ingredientes que quieras. Sobre la receta básica de ensaladilla rusa, que lleva como ingredientes principales patata, zanahoria, huevo y mayonesa, se pueden añadir otro tipo verduras, encurtidos, marisco, atún...
Ingredientes para 6 personas: 3 patatas, 4 huevos, 2 zanahorias grandes, 300 g de mayonesa casera, sal, 15 ml de vinagre de vino blanco.
Elaboración: Cocemos las patatas y las zanahorias, sin pelar, en una cacerola con abundante agua. Lo hacemos a fuego suave, sin prisas, y vamos retirando las hortalizas cuando notemos que, al pinchar con una brocheta, están al dente. Las zanahorias estarán listas antes que las patatas, aunque todo dependerá del tamaño y la antigüedad de ambas. Mientras tanto cocemos tres huevos, sumergiéndolos en un cacito con agua hirviendo con sal y un chorrito de vinagre. Retiramos después de 10-12 minutos y refrescamos inmediatamente en abundante agua helada para cortar la cocción. Pelamos, picamos finamente y reservamos. Cuando las hortalizas estén listas y hayan perdido temperatura, las pelamos y picamos o, en el caso de la patata, rallamos. Mezclamos con los huevos y sazonamos al gusto. Preparamos una mayonesa casera, usando un poco de aceite de oliva para dar un toque extra de sabor. Añadimos, removemos bien y guardamos en la nevera. Atemperamos unos minutos antes de servir.
9. Tortilla de patatas
Para Pakus es impensable no tener siempre a mano huevos y patatas para hacer una tortilla de patatas, que no requiere ningún tipo de planificación ni esfuerzo. Lleva algo más de tiempo que la mayoría de recetas de este listado, pero solo es cuestión de tener un ojo vigilando que nada se queme.
Ingredientes: 700 g de patatas, 300 g de cebolla, 6 huevos, sal y aceite de oliva.
Elaboración: Comenzamos con la tarea más larga, la de caramelizar la cebolla que nos llevará unos 30 minutos. Para ello, pelamos la cebolla y la cortamos en juliana. Después la ponemos en una sartén a fuego muy lento y dejamos que se haga muy despacio, removiendo de vez en cuando. No nos interesa que se dore la cebolla sino que se vaya pochando muy despacio. Mientras la cebolla se hace, pelamos las patatas y las cortamos en rodajas finas, procurando que todas ellas sean de tamaño uniforme. Las dejamos en agua durante 15 minutos y ponemos una sartén con aceite de oliva abundante en el fuego. Sin dar tiempo a que el aceite se caliente, añadimos las patatas y dejamos que se vayan friendo muy despacio, partiendo de un aceite casi en frío. Así conseguimos que las patatas se confiten en lugar de dorarse. De todas formas, cuando lleven unos diez minutos y hayamos removido de vez en cuando, podemos subir el fuego para conseguir que algunas de las patatas queden más tostaditas, originando así contrastes en el plato final. Sacamos las patatas y las escurrimos bien del aceite y las ponemos en un bol grande. Escurrimos la cebolla cuando esté en su punto, y la ponemos sobre las patatas. Batimos los huevos y los añadimos al bol, removiendo con un tenedor para que se mezclen bien los tres ingredientes.
10. Ensalada de garbanzos
En Directo al Paladar somos muy fans de los botes de legumbres, una conserva muy saludable y socorrida para hacer todo tipo de elaboraciones.
Liliana Fuchs es especialmente adepta de los garbanzos, que saltea en unos minutos con especias o hierbas o combina con una salsa rápida, como el tzatziki, pimientos al microondas o sobras de pisto. También los usa mucho en ensaladas como esta que os dejamos a continuación, con brócoli, cilantro y limón.
Ingredientes para 1 persona: 200 g de garbanzos cocidos, 2 tallos de brócoli, 4 tomates cherry, 3 pepinillos pequeños, 1 manojo de cilantro fresco, ajo granulado al gusto, tomillo seco o fresco al gusto, 1 limón, aceite de oliva virgen extram pimienta negra molida y sal.
Elaboración: Escurrir los garbanzos con suavidad bajo el grifo del agua y secar bien. Si se tienen ganas, pelar a mano para que la ensalada sea mucho más agradable en textura, y más digestiva. Una ración de garbanzos se hace rápidamente, apretando cada legumbre con suavidad. Disponer en una fuente. Lavar y secar muy bien el cilantro, sin necesidad de retirar completamente los tallos, muy aromáticos. Picar a conciencia a cuchillo, y añadir a la fuente. Cortar con un buen cuchillo el exterior de los tallo de brócoli, hasta dejar el núcleo central, casi blanco y muy tierno. Picar en cubitos pequeños, y añadir. Lavar, secar y trocear o picar los tomates. Picar también los pepinillos escurridos, y añadir todo a la fuente. Aderezar con ajo, tomillo, sal y pimienta al gusto. Añadir el zumo del limón y parte de su ralladura. Aliñar con un chorro de aceite de oliva virgen extra, remover bien y probar. Ajustar los aderezos al gusto y refrigerar hasta el momento de consumir. Será más sabrosa si la dejamos reposar un par de horas, pero es mejor no servirla helada.
11. Pollo al curry
El pollo al curry es una receta fácil y socorrida, imprescindible en el repertorio de urgencia de Jaime de las Heras, que hace siempre pensando en que sobre salsa, que luego se puede estirar en arroces, pastas o, simplemente, para añadir sobre unas verduras al vapor.
Ingredientes para 2 personas: 2 pechugas de pollo, 1 cebolleta, 1 diente de ajo, 5 g de jengibre fresco, 1 guindilla pequeña, 5 g de curry molido, 2 g de cúrcuma molida, 2 g de comino mlido, 45 ml de tomate triturado, 2 g de sal, pimienta negra moida, 200 ml de leche de coco, aceite de oliva, cilantro fresco o perejil.
Elaboración: Lo primero es tener preparados todos los ingredientes. Cortar el pollo en piezas de un bocado. Picar la cebolleta y muy fino el diente de ajo, el jengibre y la guindilla sin las semillas, si la usamos. Si usamos cebolla troceada congelada ahorraremos aún más tiempo. Calentar un poco de aceite en una sartén o cazuela y freír la cebolleta 2 minutos. Agregar el ajo, el jengibre y la guindilla, dar unas vueltas e incorporar el tomate. Pasado 1 minuto, agregar todas las especias y remover bien. Incorporar el pollo, salpimentar y mezclar. Cocinar a fuego fuerte unos pocos minutos, hasta que esté dorado por todas partes. Cubrir con la leche de coco o nata y dejar reducir ligeramente. Servir con perejil o cilantro fresco picado.
12. Huevos rellenos
Otra receta muy socorrida con huevos, a la que recurre con frecuencia Jaime de las Heras, en múltiples combinaciones: "Rápido, contundente y puedes jugar a voluntad con el relleno (ahumados, algún fiambre cocido, unas gambas descongeladas, la carne de algún bicho de mar) que tengas por casa, con el tomate, con la mayonesa o con la salsa (le puedes meter una punta de soja, de mostaza, de wasabi, hacer una salsa rosa...)".
Os dejamos aquí, en cualquier caso, la receta más clásica de huevos rellenos, de atún y pimientos.
Ingredientes para 12 unidades: 6 huevos, 200 g de atún en conserva en aceite de oliva, 1 pimiento morrón en lata, sal y mayonesa.
Elaboración: Cocemos los huevos y los pelamos una vez fríos. Los abrimos por la mitad y sacamos todas las yemas con cuidado de no romper las claras. En un cuenco aparte ponemos las yemas, reservando una, el bonito muy bien escurrido, el pimiento morrón troceado, tres cucharadas de mayonesa y una pizca de sal. Mezclamos muy bien todo con ayuda de un tenedor, a la vez que presionamos para que los ingredientes se deshagan un poco. Rellenamos con esta mezcla cada mitad de huevo. Cubrimos con un poco de mayonesa y adornamos con unas tiras de pimiento y yema rallada. Conservamos tapados en la nevera hasta el momento justo de consumir. Quedan mucho más ricos si hacemos nosotros mismos la mayonesa, pero si estamos en plan vagos, podemos tirar de una de bote.
13. Ensalada César de brócoli
Terminamos nuestra selección de recetas con esta ensalada César con brócoli, que es parte del repertorio habitual de Liliana Fuchs.
"Mi verdura favorita", explica. "Me encanta asarlo, pero si no me apetece hacer nada simplemente lo cuezo al dente en el microondas, y lo acompaño con un huevo escalfado (o cocido, que suelo tener siempre hechos en la nevera), migas de bacalao desalado (otro básico de nevera) o monto una ensalada abriendo una lata de anchoas, como esta César".
Ingredientes para 2 personas: 1 brócoli grande (o 2 pequeños), 1 diente de ajo, 2 anchoas, 50 ml de zumo de limón y su ralladura, 10 ml de vinagre de manzana, 15 ml de mostaza de Dijon, 30 ml de mayonesa o yogur griego natural, 1 lechuga romana, queso parmesano rallado al gusto, picos integrales machacados al gusto, pimienta negra molida, aceite de oliva virgen extra.
Elaboración: Cortar los floretes del brócoli dejándolos en unidades pequeñas, procurando que más o menos tengan el mismo tamaño. Reservar los troncos para otra receta, como estos noodles. Lavar y escurrir con suavidad. Escaldar 2-3 minutos en agua hirviendo y enfriar rápidamente, o cocer al vapor en el microondas, solo para romper la textura de verdura cruda, pero dejándolo firme y algo crujiente. También podríamos hacerlo al horno si lo tuviéramos encendido, o usarlo crudo. Machacar con un mortero o picar muy finas las anchoas junto con el diente de ajo hasta tener una pasta. Añadir la mostaza, el vinagre, el zumo de limón y la mayonesa o yogur (o mezcla de ambos) y empezar a batir con un tenedor o mini varillas. Agregar un chorrito de aceite de oliva sin dejar de batir hasta emulsionar y tener una salsa homogénea. Añadir 2 cucharadas de queso parmesano -cantidad al gusto- y mezclar bien. Probar y ajustar los ingredientes si fuera necesario. Disponer el brócoli en una ensaladera. Añadir la lechuga cortada en juliana y lavada, y mezclar. Incorporar la salsa y mezclar muy bien. Agregar por último ralladura de limón, pimienta negra recién molida y más queso al gusto, junto con unos picos integrales a modo de picatostes.
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