Desde hace días quería hacer una mermelada de fresa con especias, que tuviera un sabor diferente a la mermelada de fresa que normalmente suelo hacer en casa. Finalmente pude hacerla este fin de semana y fue todo un éxito.
Es perfecta para acompañar tostadas, muffins, panecillos o para dar un toque dulce y especiado a algun canapé.
Los ingredientes: 450 gramos de fresas, 200 gramos de azúcar, el zumo de un limón, un par de bastoncitos de canela, clavos de olor y un par de vainas de cardamomo.
La preparación: lo primero es lavar y quitar los tallos a las fresas. Luego se cortan las fresas y se ponen en un bol por capas intercalando con el azúcar. Y se dejan reposando en la nevera de un día para otro .
Al día siguiente el azúcar y el líquido que sueltan las fresa habrán formado una especie de almibar. Se colocan las fresas, el azúcar, el líquido y el zumo de un limón en una olla y se ponen a cocinar a fuego bajo.
A medida que la preparación se vaya cocinando vamos retirando la espuma que se forma en la superficie. Al cabo de unos 20 minutos añadimos las semillas de cardamomo que se retiran de las vainas, machacadas con un mortero, unos cuantos clavos de olor y los bastoncitos de canela.
Se deja cocinar la mermelada hasta que las fresas se deshagan. Si se pone muy espesa añadimos un poco de agua para que quede de una consistencia suave.
Cuando está lista retiramos la canela y los clavos y se envasa en un frasco de vidrio esterilizado y se guarda en la nevera y listo!!!