Cuando apetece una tortilla de patatas y no se dispone de tiempo suficiente para elaborarla como mandan los cánones, existe una solución maravillosa: la tortilla de patatas con patatas fritas de bolsa. Cuentan, se dice, se comenta que esta es una creación más de Ferrán Adriá y, aunque lleva años dando que hablar, nosotros no la hemos probado hasta hoy. Y, oigan, nos ha gustado. Mucho.
Al margen de la rapidez con la que se prepara la tortilla de patatas con patatas fritas de bolsa, su otra ventaja es lo sencilla que resulta. Es una receta perfecta para perder el miedo a los fogones y para iniciarse en la cocina. La patata frita utilizada es clave y el resultado mejorará si usamos una buena marca. Podemos jugar con la variedad de patatas fritas que hay en el mundo y aportar toques interesantes de sabor a nuestra tortilla.
En un recipiente hondo batimos seis de los siete huevos, sin mezclar en exceso. Solo queremos romperlos y ligarlos ligeramente. Añadimos las patatas fritas de bolsa y mezclamos al tiempo que las rompemos ligeramente. Dejamos reposar la mezcla durante 15 minutos, lo suficiente para que las patatas se rehidraten y reblandezcan.
Calentamos un poco de aceite de oliva virgen extra en una sartén. Yo he usado una de 18 cm de diámetro en su base y 22 cm en la parte superior, pero podéis usar una un poco más pequeña si queréis una tortilla más gruesa. Añadimos el séptimo huevo a la mezcla, rompemos y mezclamos ligeramente. Con esto conseguiremos una tortilla más jugosa.
Cuando el aceite empiece a humear ligeramente, vertemos la mezcla de la patata y el huevo sobre la sartén y la extendemos por toda la superficie. Cuajamos la parte inferior a fuego medio alto durante un minuto y volteamos con ayuda de un plato. Terminamos de hacer la tortilla por la otra cara durante un minuto más. Si os gusta la tortilla muy cuajada, solo tenéis que aumentar el tiempo de sartén al gusto.
Con qué acompañar la tortilla de patatas con patatas fritas de bolsa
Soy de la opinión que los acompañamientos perfectos de toda tortilla son un buen pan y una ensalada sencilla, ya sean unas hojas verdes, unos trocitos de tomate o unos dados de pepino. Si va a ser la protagonista de nuestra comida o cena, la tortilla de patatas con patatas fritas de bolsa no necesita de mucho más ¿no creéis?
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