Con estos calabacines rellenos de queso de cabra y pesto, en un rato podréis disfrutar de un plato exquisito y según el tipo de queso que le pongáis, con un sabor más o menos intenso. Siempre me han gustado este tipo de recetas en las que se prepara todo a la vez en el horno, sean los comensales que sean, y que no te obligan a estar pendiente de que parte se enfríe mientras que el resto acaba de hacerse.
Este tipo de hortalizas así cocinadas son muy versátiles a la hora de elegir los rellenos, y es que a medida que vamos repitiendo la receta les vamos incorporando distintos ingredientes y adaptándolas a nuestros gustos personales.
Ingredientes
- Calabacín grandes 2
- Pan duro (rebanadas) 4
- Tomate cherry 20
- Queso de rulo de cabra 0.5
- Piñones 3 cucharadas
- Pesto de albahaca 30 ml
- Queso parmesano o grana padano 50 g
- Aceite de oliva virgen extra 45 ml
- Sal
Cómo hacer calabacines rellenos de queso de cabra y pesto
- Tiempo total 1 h 5 m
- Elaboración 20 m
- Cocción 45 m
omenzar partiendo los calabacines a lo largo y con una cuchara o un vaciador de frutas ir quitando la pulpa hasta dejar como una barca de calabacín con su piel. Cortar las rebanadas de pan duro en cuadrados y preparar en una sartén con el aceite unos picatostes, tostándolas durante unos minutos por cada lado. Reservarlos. En la misma sartén dorar los piñones con cuidado de que no se quemen. Retíralos y reservarlos.
En un bol colocar los picatostes, el queso de cabra desmenuzado, los picatostes, el queso Grana Padano rallado y los tomatitos cherry partidos a la mitad. Revolver y añadir la cucharada de pesto mezclándola bien para unirla al resto de ingredientes. Salpimentar el relleno.
Precalentar el horno con calor arriba y abajo a 180ºC. Engrasar con una pizca de aceite una bandeja de horno. Colocar los calabacines en ella y rellenar las barcas con el relleno repartiéndolo en cuatro partes. Añadir un poco de agua en la bandeja para que no se sequen durante la cocción. Hornear durante 40 minutos.
Con qué acompañar los calabacines rellenos
Los calabacines rellenos de queso de cabra y pesto son una muy buena opción para una cena ligera o como entrante para una comida acompañando a un pescado a la plancha. La carne del calabacín como os habréis dado cuenta no se emplea en el relleno, pero aquí no se tira nada, guardarlo bien tapado con un film de cocina en el frigorífico para, por ejemplo, un bizcocho.
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