Nos encanta hornear pan y este pan de espelta y soja es uno de nuestros favoritos. ya un habitual en nuestros desayunos. De todos son conocidos los múltiples beneficios de la soja, y desde que descubrí su formato en harina intento tomarla también de este modo.
En los panes no es conveniente utilizar más de un 20% del total de la harina empleada, pero aún así no hemos podido resistirme a probar esta mezcla aunque la cantidad de soja sea pequeña. Os recomiendo probar distintas combinaciones de harinas para elaborar vuestro propio pan en casa. Simplemente variando proporciones se obtienen matices muy interesantes.
Ingredientes
- Harina de fuerza ecológica 350 g
- Harina de espelta blanca 150 g
- Harina de soja 25 g
- Agua 140 ml
- Leche entera 150 ml
- Levadura fresca de panadería 12 g
- Sal 10 g
Cómo hacer pan de espelta y soja
- Tiempo total 1 h
- Elaboración 30 m
- Cocción 30 m
- Reposo 3 h
En un cuenco amplio mezclamos las harinas y la sal. Hacemos un hueco en el centro donde desmenuzamos la levadura. Agregamos poco a poco el agua y la leche a la vez que removemos con una cuchara de palo, integrando la harina al mismo tiempo para formar una masa.
Una vez tengamos una masa homogénea, no pegajosa, hacemos una bola y la dejamos reposar tapada durante una hora y media, hasta que doble su volumen inicial. Pasado este tiempo, sacamos el gas a la masa, presionándola ligeramente y damos forma de barra.
Colocamos la masa en un molde abundantemente enharinado y la tapamos para que fermente de nuevo. Precalentamos el horno a 200º. Si queremos cubrir la superficie del pan con semillas de sésamo, como en este caso, debemos pulverizar el pan una vez fermentado con agua, y luego espolvorear las semillas.
Horneamos el pan a 180º durante una media hora. El pan habrá subido y tendrá un bonito color tostado. Sacamos el pan a una rejilla y dejamos que enfríe totalmente antes de consumirlo.
Con qué acompañar el pan de espelta y soja
El pan de espelta y soja es ideal para el desayuno. Si tostamos unas rebanadas de pan, las untamos con buena mantequilla y mermelada casera, tendremos un desayuno completo. Si además añadimos alguna pieza de fruta o un buen zumo de naranja recién exprimido empezaremos el día con mucha energía. Nosotros ya lo hemos hecho durante dos fines de semana y la verdad es que los días empiezan con mejor humor de esta forma.