El otro día en el mercado encontré unas almejas con un aspecto estupendo aunque a un precio realmente prohibitivo, por eso que al no poder preparar un plato solo con ellas como era mi idea, rápidamente se me vino a la cabeza estos fettuccine alle vongole. Así, con una pequeña cantidad, podía cocinar una receta riquísima y ligera que además me quitaba ese antojo que tenía de marisco.
Este plato lleva el toque picante de los pimientos rojos, como siempre estos se podrían suprimir si lo van a tomar niños o alguna persona que no lo tolera. Pero si tenéis la oportunidad de prepararlo como os pongo en la receta no os lo penséis. El contraste entre el sabor a mar de las almejas y el picante del pimiento resulta delicioso.
Ingredientes
- Diente de ajo 3
- Pimientos del piquillo picantes o guindillas 2
- Aceite de oliva virgen extra 30 ml
- Vino blanco 180 ml
- Caldo de pescado o fumet 200 ml
- Zumo de limón 30 ml
- Almeja fina 800 g
- Fettuccine 380 g
- Perejil fresco
- Sal
Cómo hacer fettuccine alle vongole
- Tiempo total 30 m
- Elaboración 10 m
- Cocción 20 m
Comenzar poniendo una hora antes las almejas en agua fría con un puñado de sal gorda a remojar para que liberen la arena que pudieran tener. Recordar que hay que eliminar aquellas que se encuentren abiertas o rotas.
Picar los dientes de ajo y los pimientos del piquillo picantes muy menudos. Sofreírlos durante un minuto en una cacerola con el aceite. Añadir el vino blanco, el caldo de pescado y el zumo de limón. Llevar a ebullición y añadir las almejas. Cubrir la olla y dejar hervir durante cinco minutos moviendo la cacerola cada poco. Retirar aquellas almejas que no se hayan abierto. Rectificar de sal.
Mientras que se hacen las almejas poner una olla con agua a hervir y sal. Añadir, cuando llegue a ebullición, los fettuccine y cocer según las instrucciones del fabricante. Escurrir y mezclar en la cacerola con las almejas y su jugo. Espolvorear perejil picado y servir rápidamente.
Con qué acompañar los fettuccine alle vongole
Los fettuccine alle vongole son un clásico de la cocina italiana y espero que una vez que los preparéis también lo sean en vuestra casa y es que con tan pocos ingredientes parece increíble conseguir un plato con tanto sabor. Además, se prepara muy rápido, por lo que es ideal tanto para una cena especial como para una comida de diario. Con una ensalada sencilla y una copa de vino blanco o de sidra, es un menú de lujo.
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