Hay recetas que gustan tanto que una quiere hacer cada semana y los mejillones a la sidra son una de ellas. Además de preparse en un santiamén, con poquísimo esfuerzo, es que son exquisitos y muy nutritivos.
Puede que lo más complicado sea encontrar la sidra natural, pues la que normalmente encontramos en los supermercados es la achampanada y esa no sirve para este propósito. Mi recomendación es que busques en grandes superficies o tiendas de alimentación especializadas en productos asturianos. Allí te estará esperando.
Si no la usas toda para la salsa, no pasa nada. La puedes usar para cocinar otras recetas o servirla como acompañamiento de los mejillones. Eso sí, mejor escanciada para que se airee y disfrutes de ella en todo su esplendor.
Ingredientes
- Mejillones frescos 1 kg
- Diente de ajo 1
- Aceite de oliva virgen extra 30 ml
- Harina de trigo 10 g
- Pimentón dulce 5 g
- Sidra natural 150 ml
- Laurel hoja 3
- Pimienta negra molida (opcional)
- Sal (opcional)
Cómo hacer mejillones a la sidra
- Tiempo total 25 m
- Elaboración 15 m
- Cocción 10 m
Limpiamos bien los mejillones, retirando las barbas y los restos de suciedad que puedan tener las conchas. Todos los detalles sobre cómo limpiar y cocinar mejillones sin esfuerzo os los contamos hace tiempo, echad un vistazo de nuevo al post para facilitaros la tarea. Es importante desechar los que tengan las conchas rotas o estén abiertos. Los introducimos en una cazuela, la tapamos y los cocemos a fuego fuerte durante tres o cuatro minutos o hasta que estén abiertos.
Mientras tanto pelamos el diente de ajo y lo rallamos o picamos finamente. Lo pochamos en una sartén con aceite de oliva y, antes de que se empiece a dorar, agregamos la harina. Removemos para integrar y cocemos un minuto, así le quitamos el sabor a crudo. Después incorporamos el pimentón (fuera del fuego para que no se queme), la sidra y las hojas de laurel. Removemos de nuevo para que la harina se diluya bien y no se formen grumos y cocemos la salsa a fuego suave.
En este rato repasamos los mejillones, descartando los que no se hayan abierto. Separamos y tiramos también las conchas que no tengan "bicho" y colamos los jugos que han soltado durante la cocción. Yo los paso por un colador de malla fina con papel absorbente para que recoja toda la arenilla que puedan tener.
Este jugo tiene mucho sabor, así que lo incorporamos a la salsa y removemos. Probamos el punto de sabor y, si lo consideramos necesario, agregamos sal y pimienta negra aunque es muy posible que no lo necesite. Después de cinco minutos de cocción introducimos los mejillones en la salsa y les damos un hervor corto, de unos dos minutos. Servimos inmediatamente.
Con qué acompañar los mejillones a la sidra
Lo más recomendable es hacerse con una buena hogaza de pan porque la salsa de estos mejillones a la sidra lo pide a voces. Vas a querer rebañar el plato hasta sacarle brillo. Una vez listo esto, la bebida corre de tu cuenta. Por supuesto que unos vasos de sidra le van a la perfección, pero también un vino blanco fresquito, una cerveza... Al gusto de cada cual.
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