Aunque lo primero que nos viene a la cabeza cuando escuchamos salsa cuatro quesos es un buen plato de pasta, lo cierto es que da mucho más juego del que podamos pensar a bote pronto. Es perfecta para acompañar carnes, especialmente aves y cerdo, y verduras. Y eso no es todo. También se puede usar para cocinar en ella, permitiendo que los elementos principales absorban todo su sabor, jugosidad y cremosidad.
Imaginad unas patatas asadas con un poco de mantequilla y una cucharada de salsa cuatro quesos por encima o unas pechugas de pollo a los cuatro quesos. Estas son solo un par de sugerencias, pero seguro que a vosotros se os ocurren muchas más. ¿Nos las contáis en los comentarios? Nos encantará leeros y, a ser posible, hacerlas realidad.
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Depositamos el queso Parmesano troceado en el vaso del Thermomix. Programamos 10 segundos a velocidad 8 para rallarlo. Añadimos los quesos Masdaam, Cheddar y azul troceados y programamos de nuevo 5 segundos a velocidad 6. Bajamos los restos de queso de las paredes del vaso.
Incorporamos la leche al vaso y cocemos la mezcla, programando el robot 10 minutos, 80º C y velocidad 2. Añadimos pimienta y nuez moscada al gusto y mezclamos durante 5 segundos a velocidad 5. Dejamos atemperar antes de guardar en la nevera hasta el momento de usar. La salsa espesará con el reposo.
Para preparar esta salsa de forma tradicional, sin Thermomix, rallamos todos los quesos y los colocamos en una cacerola con la leche. Calentamos a fuego suave y removemos de vez en cuando mientras esperamos que los quesos se fundan y amalgamen. Añadimos pimienta y nuez moscada al gusto y listo.
Con qué acompañar la salsa cuatro quesos
Lo primero que nos viene a la cabeza cuando hablamos de salsa cuatro quesos es pasta, pero esta salsa tiene muchos otros usos. Podemos usarla para acompañar carnes blancas y verduras o, incluso, para cocinarlas en ella. Es, también, un sustituto excelente de la salsa bechamel.