No es necesario esperar a que llegue el cumpleaños de nuestros hijos para preparar una merienda especial con sus amigos. Podemos reservar una tarde de sábado, ahora que ya ha llegado definitivamente el frío y no apetece tanto salir a la calle, para dedicársela a los más pequeños. Por eso vamos a explicaros cómo preparar una mesa de merienda con ayuda de los niños.
Como es normal, los progenitores nos preocupamos siempre de que las comidas de nuestros hijos sean los más sanas posibles y de que no se nutran a base de alimentos ricos en azúcares y grasas, pero podemos fácilmente conseguir un equilibrio entre lo que les apetece y lo que les conviene.
¿Cuál era vuestra merienda preferida? Recuerdo que había una combinación que a mí gustaba especialmente: una rebanada de pan untada con margarina Tulipán y mermelada de fresas. Aún recuerdo lo importante que me sentía cuando mi madre me permitía, bajo su supervisión, extender yo sola la margarina por encima del pan.
Desde muy temprana edad, los niños son capaces de ayudarnos en la cocina, por supuesto siempre adecuando las recetas que vamos a hacer con su edad. Os sorprendería ver a mi sobrino de dieciocho meses removiendo con una cuchara la masa para preparar un bizcocho. A todos les gusta que les demos responsabilidades.
Con esa premisa, pensad que vuestros hijos pueden acompañaros cuando vayáis a preparar su merienda. Bien untando con margarina Tulipán tiernas rebanadas de pan de molde, bien removiendo la masa de unas magdalenas que luego pueden ayudaros a colocar dentro de sus correspondientes cápsulas o cortando galletas con un cortapastas divertido.
Y si queréis un consejo para triunfar con niños, preparad con ellos un buen bol de palomitas. Pero os propongo que las realicéis de modo tradicional, untando el fondo de una cacerola con margarina Tulipán y dejando que se hagan a fuego muy lento. Disfrutaréis cuando veáis sus caras de felicidad cuando empiecen a abrirse los granos de maíz y a estallar las palomitas. A mis hijos les encanta.
Para variar un poco las clásicas palomitas podéis caramelizarlas después de haberlas hecho. Para ello, poned un poco de margarina Tulipán en la cacerola, añadid unas cucharadas de azúcar moreno (así cogerán más color), echad las palomitas y dadles un par de vueltas con una cuchara para que se impregnen bien. Si utilizáis azúcar blanco podéis poner unas gotas de colorante para teñirlas. Esta opción es la que gusta más a las niñas, sobre todo si es rosa.
Es inevitable, porque nos estamos refiriendo a niños, que incluyáis alguna gominola o chuchería en la merienda. Mejor si las encontráis sin azúcar, son igual de buenas. Las podéis presentar agrupadas por colores, por ejemplo. Una tarea en la que también pueden participar los niños, aunque en este caso deberéis vigilar que no se las coman antes de tiempo, algo muy frecuente.
Por último, implicad también a los niños para arreglar una bonita mesa. Si son sus amigos los que vendrán a merendar, se sentirán luego orgullosos de su trabajo. Elegid una bonita vajilla de papel, con dibujos de sus héroes o princesas preferidas y dejad que pongan con rotulador de tinta endeleble los nombres de sus invitados en cada vaso, para que no haya confusiones.
Espero que os hayan sido útiles nuestros consejos sobre cómo preparar una mesa de merienda con ayuda de los niños. En este especial de Recetas Tulipán encontraréis una deliciosa selección de recetas para poner en práctica lo explicado, así como numerosos consejos con los que conseguiréis hacer las delicias de niños y no tan niños.
Fotots | rahego, Jo@net, Jimee, Jackie, Tom & Asha, swambo y owlhere En Recetas Tulipán | Arroz con leche y margarina Tulipán. Receta