Hay diferentes tipos de carnes a nuestra disposición en el mercado y una de ellas es la de cerdo, que en los últimos años ha ganado popularidad y se ha alejado un poco de su fama de carne grasa y nociva para la salud. Por eso hoy nos preguntamos, la carne de cerdo, ¿necesita ser reivindicada en la cocina?.
Carne de cerdo: los cambios que debemos recordar
Siempre se ha considerado que la carne de cerdo es una de las más grasas disponibles en el mercado, por ello, nunca ha tenido buena reputación en el marco de una alimentación saludable. Sin embargo, hay algunos cambios que merecen ser recordados y que nos hablan de una nueva y diferente carne de cerdo.
La clave está en la alimentación de los animales y en su actividad, que fue variando con el paso de los años, dando origen a una carne de cerdo más magra, con mejor calidad de grasas y por lo tanto, con mayores beneficios para el organismo.
Así, hoy tenemos una carne de cerdo con mayor proporción de ácidos grasos monoinsaturados y con menor contenido graso total así como también, con menor aporte de colesterol.
También se han incluido suplementos a la dieta de los cerdos para dar origen a una carne con mayor aporte proteico y menor concentración de lípidos, lo cual sin duda es parte de los grandes cambios que debemos recordar para entender por qué la carne de cerdo de hoy, no es la misma de la disponible hace muchos años atrás.
Carne de cerdo: no todos los cortes son iguales
Aunque sabemos que hoy la carne de cerdo es mucho más sana que antes, no podemos dejar de aclarar que no todos los cortes son iguales, sino que tal como sucede con otras carnes, podemos encontrar piezas más o menos grasas, con mayor aporte proteico o con contenido de minerales diferentes.
Así, entre los cortes de cerdo más recomendables encontramos el solomillo de cerdo, el lomo de cerdo, la paleta y la pierna de cerdo, que no superan el 10% de grasa por cada 100 gramos ni tampoco alcanzan el 70% de colesterol, cantidad promedio presente en la carne vacuna o en otros cortes de cerdo.
Entre los cortes de cerdo menos recomendables por ser más grasos y menos proteicos, encontramos el tocino, las manitas de cerdo o la panceta.
Asimismo, en el cerdo se nota grandemente la diferencia de una raza a otra, y se sabe que la carne de cerdo ibérico puro es de mejor calidad que la derivada de razas porcinas cruzadas.
La carne de cerdo ibérico puro no sólo es mejor respecto a sus características organolépticas sino que también, concentra menos grasas saturadas y más ácidos grasos monoinsaturados como los presentes en el aceite de oliva, lo cual habla de una carne más sana para la salud cardiovascular por la calidad de sus lípidos.
Claramente la carne de cerdo debe ser reivindicada pero teniendo la precaución de no generalizar al momento de su inclusión en la dieta, pues no toda carne de cerdo es de mejor calidad nutricional y más sana que la derivada del ganado vacuno, bovino u otro.
Cómo sacar mayor provecho al cerdo en la cocina
Para que podamos reivindicar el cerdo en nuestra cocina y sacarle mayor provecho a sus propiedades nutricionales, recomendamos, además de escoger cortes magros, cuidar los métodos de cocción, evitando adicionar grasas de mala calidad, colesterol y calorías a sus recetas.
Así, lo mejor es cocinar carne de cerdo magra al horno, al papillote, en salteados con poco añadido de materia grasa o bien, a la parrilla o a la plancha en cocciones rápidas pero igualmente sabrosas.
Podemos combinar el cerdo con frutas y vegetales varios, pues la grasa de buena calidad presente en su carne favorecerá la absorción de las vitaminas liposolubles presentes en las hortalizas y frutos, mientras que éstos aportarán sus jugos y sabores al plato.
Por otro lado, también es recomendable sumar ingredientes ricos en vitamina C a los platos con carne de cerdo, pues éstos favorecerán la absorción del hierro presente en la carne. Así, podemos elaborar cerdo con zumo de limón o naranja, con pimientos, tomates, perejil, cilantro u otras hierbas y vegetales frescos.
Teniendo en cuenta todo lo antes dicho, no debemos dejar de incluir carne de cerdo a nuestras recetas, y para ello, os dejamos algunos platos sabrosos y nutritivos a base de cerdo que puedes comenzar a elaborar en tu cocina:
En Directo al Paladar | Los diferentes tipos de carne y su influencia en la salud En Directo al Paladar | ¿Es sana la carne de cerdo? Imagen | Thinkstock y Thinkstock