Beber más alcohol del imaginado suele ser algo habitual en estas fechas y ello no sólo puede conllevar una resaca sino también, molestias digestivas, acidez e hinchazón de vientre e incluso, unos kilos de más. Por eso, te recomendamos prevenir el exceso de alcohol esta Nochevieja y para ello, te contamos cuánto es mucho y cómo evitar pasarse de copas.
Una copa ya es mucho cuando se trata de alcohol
Cuando hablamos de bebidas alcohólicas debemos considerar que hasta hace un tiempo atrás una copita de vino cada día era "aconsejable" y "saludable", pero al día de hoy sabemos que aun una copa es mucho, pues no existe una dosis segura de alcohol y aun en mínimas cantidades perjudica la salud.
Sin embargo, si hablamos de Navidad o de Nochevieja, es claro que algo beberemos y por lo tanto, lo recomendable es no caer en excesos, esto es, no superar las dos copas de vino o dos unidades de alcohol en la cena de Nochevieja (incluido el brindis).
Si podemos limitarnos sólo a una copa de cualquier bebida sería ideal, pues cuanto menos alcohol mejor, ya que reducimos el efecto negativo del mismo sobre la salud.
No todas las bebidas son iguales
Aunque todas las bebidas conllevan alcohol y es éste el denominador común del efecto negativo de las mismas, debemos considerar que algunas en particular poseen muy altos volúmenes de alcohol y peor aun, en algunos casos las bebidas presentan simultáneamente alcohol y azúcar, dos enemigos de la alimentación actual que pueden generar adicción y sumar calorías de muy mala calidad al organismo.
Entonces, debemos considerar que algunas bebidas como el vino tinto o la cerveza son opciones con bajo volumen de alcohol y que en el caso del primero puede ser una buena fuente de antioxidantes como es el resveratrol y si nos referimos a la cerveza, ésta es fuente de polifenoles así como de potasio.
El champagne y la sidra son buenas alternativas para el brindis porque no presentan mucho alcohol, sin embargo, se encuentran entre las bebidas que más resaca ocasionan y no poseen muchos nutrientes de calidad como la cerveza o el vino tinto.
Los menos recomendables serían entonces los cócteles con alcohol y azúcar simultáneamente, así como bebidas de alto volumen de etanol como la ginebra, los licores, el whisky, ron o vodka.
Cómo evitar el exceso de alcohol
Como dijimos, lo ideal es beber lo mínimo posible, pero si hablamos de Nochevieja es aceptable no caer en excesos.
Para evitar pasarnos de copas lo mejor que podemos hacer es no perder nunca el control de la cantidad que llevamos bebiendo, es decir, contabilizar las cervezas, las copas de vino o de champagne que ingerimos, intentando no superar las dos unidades.
Además de llevar registro y no perder la cuenta de lo bebido, un buen truco es acompañar la comida con agua o bebidas sin azúcar ni alcohol, reservando las bebidas alcohólicas para el brindis únicamente. De esta forma será más fácil no superar las dos unidades en Nochevieja.
Por otro lado, usar copas o vasos finos y largos puede ser de utilidad, ya que tienen menos capacidad aunque visualmente nos generan la idea contraria y por ello, podemos beber menos sin darnos cuenta.
Mezclar el vino u otra bebida con agua o acompañarla de la misma así como de hielo puede ser otra forma de beber menos alcohol sin darnos cuenta o al menos de no sentir tanto la limitación en cuanto a su consumo.
Por último, dejar la copa apoyada en la mesa y no tenerla siempre en la mano es clave, ya que su cercanía y sobre todo, sostener la bebida todo el tiempo es un incentivo para su consumo.
Pero siempre debemos recordar que cuanto menos alcohol mejor para nuestra salud, pues aun una copa diaria puede ser mucho en estos casos.
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