La evolución y el consumo de leche. Cómo nos hicimos Mampiros

La evolución y el consumo de leche. Cómo nos hicimos Mampiros
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Un tema recurrente en distintos foros es el de si debemos seguir tomando leche cuando somos adultos. Pasada cierta edad, y en según qué poblaciones, tomar leche puede ocasionar problemas.

La leche es una alimento de lo más singular dentro del el reino animal. Da nombre a todo un grupo de animales denominados mamíferos precisamente porque son capaces de producir esta sustancia en un órgano llamado glándulas mamarias. Lo curioso del consumo de leche, es que los humanos empezamos a consumir leche de otros mamíferos ya en edad adulta, convirtiéndonos en auténticos "mampiros". ¿Es esto "natural"? ¿Debemos hacerlo? ¿Qué problemas tiene?

La composición de la leche de los distintos mamíferos es diferente. Por ejemplo, la leche humana tiene una mayor concentración de azúcares que la leche de vaca. Además, la propia leche cambia con el tiempo. La primera leche que ingiere un mamífero es conocida como calostro y contiene anticuerpos maternos que ayudar a construir el sistema inmunitario del recién nacido, ofreciéndole una protección en sus primeros meses de vida.

El peculiar azúcar de la leche. La lactosa

La lactosa es el nombre que recibe el azúcar de la leche. Se trata de un disacárido compuesto por glucosa y galactosa. Este azúcar es un elemento realmente extraño dentro de la naturaleza. Aparte de en algunas plantas y tubérculos tropicales, sólo se encuentra en la leche de los mamíferos. Además es un compuesto relativamente complejo y energéticamente costoso de sintetizar.

Llegada cierta edad, un niño que esté mamando perdería la capacidad de digerir la leche materna y esto sería la pieza que desencantes encadenaría un proceso de destete. Cuando esto ocurre la madre comienza de nuevo a tener la menstruación. Este procedimiento ha sido utilizado durante miles de años como un mecanismo de control de la natalidad. Muchas mujeres sabían que si seguían amamantando a sus hijos, las probabilidades de volverse a quedar embarazada eran menores. Por supuesto, este método no es 100% seguro y no debe ser utilizado hoy en día como método anticonceptivo.

La evolución y la lactasa

El problema con la lactosa es que depende de una enzima, la lactasa, que no todas las poblaciones humanas mantienen activa durante toda su vida. Los genes que codifican la expresión de esta enzima han sufrido presiones selectivas a lo largo de nuestra evolución. Estas presiones de selección natural han ido de la mano de nuestro desarrollo como sociedad.

Intolerancia a la lactosa

Intolerancia a la lactosa por países. Más oscuro = más intolerancias

Así, las poblaciones que primero domesticaron animales y empezaron a consumir leche tienen una mayor cantidad de individuos tolerantes a la leche. Por el contrario sociedades que domesticaron animales más tarde o que hicieron uso de estos animales domésticos para otras labores, muestran mayor incidencia de intolerancias a la leche. Un ejemplo paradigmático es el de Bangladesh, donde las intolerancias a la leche afectan a un gran número de individuos. En general, las poblaciones asiáticas tienen los mayores índices de intolerancia.

Current Worldwide Total Milk Consumption per capita

Pero, ¿por qué tomamos leche?

La cuestión es, ¿qué ventajas evolutivas nos proporcionaba consumir leche frente a aquellos que no lo hacía o no la toleraban?

Aquí tenemos diversas posibilidades. Desde luego, consumir leche ofrece ventajas evidentes en el contexto de las primeras poblaciones ganaderas. El propio animal servía como mecanismo del trabajo, fuente de proteínas a través de la carne y se podía extraer un bebida nutritiva durante mucho tiempo en forma de leche. No obstante, es muy posible que los primeros granaderos tuvieran problemas a la hora de consumirla. De ahí que se conozca el uso de la fermentación láctica desde hace miles de años.

El yogurt y el queso no son más que dos mecanismos mediante los cuales las bacterias lácticas consumen la lactosa o parte de la lactosa de la leche y dan lugar a productos fermentados que podemos consumir. En el queso prácticamente no queda nada de lactosa, mientras que el yogurt queda un residuo mayor de lactosa, pero cuando comemos yogurt también ingerimos las bacterias lácticas y esto hace su digestión más sencilla.

Un hecho conocido es que las poblaciones del norte de Europa y África, como los Masai, tienen una mayor tolerancia a la leche (ver tabla). Una hipótesis que podría explicar esto está relacionada con la vitamina D. Esta vitamina necesita de la luz del sol y está relacionada con la absorción de calcio. En latitudes con poco sol el calcio podría haber sido un problema, y el consumo masivo de leche a edades adultas podría haber sido la solución.

Otra hipótesis es que la leche, fuera una opción más segura que beber agua. Digamos que la leche vendría "higienizada de fábrica" mientras que el agua podría tener más riesgo de contaminación. Otros apuntan, a una ventaja evolutiva para la reproducción al incrementar el aporte de grasas, lo facilitaría que las mujeres tuvieran más reservas. Los investigadores todavía no tienen una respuesta clara.

También cabe la posibilidad de una hipótesis más sencilla. Simplemente, que una vez domesticados los animales que producen leche, está empezará a gustarnos, y poco a poco se fueran adaptando a su consumo las primeras poblaciones.

La pregunta de ¿es natural consumir leche después de el destete? En el caso de el ser humano depende de muchos factores. Hoy en día las poblaciones humanas han sufrido tal mezcla que sería que es probable que una misma sociedad existan individuos perfectamente adaptados a Consumirla mientras que para otros suponga un verdadero problema.

Pero, ¿es natural consumir leche?

¡Claro! Tan natural o antinatural como consumir granos de trigo o patatas o plátanos. Los animales no consumen leche siendo adultos porque no pueden. Nosotros, en el momento que domesticamos animales o cultivamos nuestros propios alimentos modificamos enormemente nuestro estilo de vida. Junto con ello también sufrimos una fuerte presión selectiva que hizo que poco a poco los individuos con mutaciones más tolerantes a estos nuevos alimentos, fueran teniendo mayor éxito reproductivo.

El problema con la evolución es que son muchos los factores que juegan a la vez. Es decir puede que a algunos individuos o poblaciones consumir leche les fuera mal, pero que tuvieran otros genes que les proporcionarán una mayor ventaja evolutiva. Lo que perdían por un lado lo compensaban por otro. Así, las poblaciones de Asia no sufrieron esa presión selectiva porque sus condiciones ambientales eran distintas. En Europa o África, la situación fue distinta y ahí sí, nos convertimos en auténticos "Mampiros".

Por tanto, la respuesta a la pregunta inicial es que la pregunta inicial no tiene mucho sentido, la pregunta que realmente nos debe importar es ¿me sienta a mí bien consumir leche?. Tomar como norma general que la leche no es buena a partir de cierta edad... Depende.

Fotos | Por pedroreyna | Wikipedia

En Directo al Paladar | La leche, ¿el alimento ideal? En Directo al Paladar | Intolerancia a la lactosa, ¿y ahora qué?

Inicio