Realizar una mala dieta supone tener más problemas de salud, sea por exceso o por defecto. En este caso nos referimos a las dietas deficientes que se asocian a los problemas hepáticos, hasta un 10% de los casos de cirrosis son debidos una dieta inadecuada.
El problema es bastante grave afectando a buena parte de la población española, hasta 4 millones de personas presentan un exceso de grasa en el hígado y unas 900.000 personas desarrollan una inflamación hepática que puede dar a lugar a una cirrosis. La mala alimentación puede compensar momentáneamente los deseos del paladar, pero contraviene las necesidades del cuerpo, son demasiados problemas los que se pueden sufrir y que deben ser puestos en una balanza para darse cuenta de que no compensa realizar una dieta inadecuada. En el encuentro anual de la Asociación Europea para el Estudio del Hígado, los expertos en hepatología alertan sobre los peligros en la salud consecuencia de la mala dieta y advierten sobre el aumento del Síndrome hepático no producido por alcohol (NASH) como resultado de una excesiva ingesta de hidratos de carbono y de grasas saturadas.
El hígado es un órgano muy importante que debe ser cuidado, es el responsable de sintetizar las sustancias para nuestro organismo. Todo tipo de especialistas nos recomienda realizar una dieta sana y equilibrada, sin embargo, los consejos en muchas ocasiones son ignorados ¿puede más la gula que la salud?, es posible.
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