Hace pocas horas el usuario de Twitter Pepo Jiménez ha publicado un vídeo en el que denunciaba que había comprado una docena de huevos y se había encontrado gusanos en su interior.
La pregunta que nos surge a todos es ¿puedo enncontrarme gusanos en un huevo de gallina? Aunque también habría que preguntarse cómo es posible que esos huevos en mal estado hayan llegado hasta la estantería del supermercado y hasta la cocina de Pepo.
¿Cómo pueden aparecer gusanos en un huevo?
Una posible explicación a tan misterioso y desagradable hallazgo la encontramos en un parásito intestinal muy común en la avicultura, el Ascaridia Galli, que suele infectar a pollos y pavos, siendo menos habitual en gallinas adultas. Se trata de un parásito de gran tamaño que puede alcanzar los 7,5 centímetros en su madurez, así que se suele detectar fácilmente en las heces de los animales y tratarse.
En principio, la presencia de este parásito no afecta directamente al huevo, aunque sí provoca decaimiento y diarrea en el animal, y para el granjero supone una pérdida económica ya que la eficiencia alimenticia de la gallina es menor (tiene que comer más para alimentar al parásito) y tienden a adelgazar en extremo a pesar de no perder el apetito.
Lo que ocurre es que, muy ocasionalmente, la lombriz se desplazada del intestino al oviducto, y cuando el huevo se forma, pasan a formar parte de él, convirtiéndolo en un auténtico huevo sorpresa, que aunque no supone un peligro para la salud humana, es muy desagradable.
Por lo visto, según escribe David Lizaso, Veterinario de Piensos Artoa en la revista Avicultura, la proliferación de estos y otros parásitos de la familia de los Nematodos y Cestodos puede deberse a los nuevos sistemas de producción que implican el acceso de las gallinas al exterior (los conocidos como huevos camperos).
¿Ha alguno os ha ocurrido encontraros gusanos en los huevos?
En Directo al Paladar | ¿Qué fue de los huevos blancos?
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