Nuestra alimentación puede influir grandemente en nuestra salud oral afectando la estructura y el aspecto físico de nuestros dientes. Por eso, te mostramos qué comer para tener los dientes blancos y que no amarilleen.
La estructura y componentes del esmalte dental
El esmalte dental es una estructura que protege las áreas internas más frágiles de los dientes, conocidas como dentina y pulpa.
Es decir, constituye la primer barrera de defensa de nuestros dientes y la más importantes contra las caries, pues si el esmalte está dañado las posibilidades de que bacterias cariogénicas colonicen nuestros dientes se incrementa considerablemente.
De color blanco brillante, es el componente más duro del cuerpo humano y está formado en un 94% de un fosfato cálcico llamado hidroxiapatita es decir que allí encontramos calcio y fósforo en elevadas proporciones.
Millones de cristalitos hidroxiapatita componen el esmalte dental y se encuentran unidos lo más juntos posible por material orgánico, formando una barrera que protege la estructura interna de los dientes.
Qué comer para tener los dientes blancos
Para preservar el esmalte dental que permite que nuestros dientes se vean blancos, es fundamental cuidar la estructura antes mencionada con una dieta de calidad y hábitos de higiene adecuados.
En este sentido, te contamos cómo debe ser nuestra alimentación para lograr unos dientes blancos, que no amarilleen:
Los alimentos más sanos y protectores
- Granos enteros y legumbres que constituyen excelentes fuentes de fósforo para nuestro organismo y también, pueden brindar fibra e hidratos complejos que se han asociado a mejor salud periodontal.
- Leche y derivados sin azúcar, que ha demostrado atenuar las manchas que pueden ocasionar en el esmalte dental alimentos como el té o el café, aportando al mismo tiempo calcio elevadas proporciones y vitamina D, que favorecen la estructura de los cristales de hidroxiapatita del esmalte dental.
- Frutas frescas con su piel que pueden ser fuente de compuestos blanqueadores naturales de nuestros dientes y ofrecer al mismo tiempo, fibra en apreciables cantidades así como azúcares sin poder cariogénico. Entre las principales frutas con efecto protector se encuentra la papaya, las fresas, el limón y la naranja.
- Agua en suficientes cantidades, clave para una hidratación correcta del organismo que favorezca el metabolismo y la salud dental en todos sus aspectos.
Los alimentos a evitar para cuidar nuestros dientes
- Té o café en exceso que pueden manchar nuestros dientes así cómo reducir la absorción de calcio en el organismo debido a su contenido en taninos y oxalatos lo cual favorece la desmineralización del esmalte dental.
- Zumos de frutas y refrescos azucarados que no solo tienen alto poder cariogénico por sus azúcares sino también, que debilitan el esmalte dental por sus ácidos, favoreciendo el ingreso de bacterias y de sustancias que pueden colorear nuestros dientes, volviéndolos más amarillos.
- Gominolas y otros dulces fuente de azúcares que pueden promover el desarrollo de bacterias que ocasionan infecciones dentales y pueden manchar así como dañar la estructura de nuestros dientes.
- Bebidas alcohólicas cuyo etanol se ha asociado a mayor riesgo de sufrir enfermedades periodontales y por lo tanto pueden provocar entre otras cosas manchas en los dientes.
Cómo podemos, para preservar los dientes blancos es clave cuidar lo que comemos, evitando los azúcares, las bebidas muy ácidas, el alcohol y alimentos como el té o el café en exceso que pueden ocasionar manchas o desmineralizar nuestros dientes.
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