Considerar nuestros hábitos y la composición corporal es clave
Si eres una de las muchas personas que con el recambio de año se ha planteado perder peso o deshacerse de los kilos de más a lo largo del 2024, necesitas conocer cuánto peso requieres bajar, y probablemente es mucho menos de lo que pensabas.
Peso objetivo según el IMC
Numerosas aplicaciones y páginas web utilizan calculadoras para estimar un peso corporal saludable que pueden arrojarnos un resultado que más que ayudarnos, nos desestima.
Estas calculadoras suelen utilizar el índice de masa corporal (IMC), es decir, un parámetro que relaciona el peso con la altura y en función de ello estima un rango dentro del cual nuestro peso se considera "normal".
Para las personas con un marcado exceso de peso, ver un número tan reducido en la pantalla puede resultar frustrante e incluso desesperante, empujando esto a acudir a dietas milagro, píldoras u otros productos que pueden ayudar a perder peso rápidamente pero también, a recuperarlo en el tiempo.
Los errores de usar IMC
El IMC sólo tiene en cuenta nuestro peso y nuestra altura, pero no considera lo principal que es cómo se compone nuestro cuerpo. Es decir, no contempla qué porcentaje del mismo es grasa y deberíamos perderlo y qué porcentaje es músculo y hueso y deberíamos preservarlo.
Por otro lado, el IMC no tiene en cuenta las diferencias que puede haber de una persona a otra en función del género, la etnia o la edad y por lo tanto arroja el mismo resultado independientemente de características particulares que resultan influyentes.
Este parámetro, si bien resulta muy práctico para evaluar a gran velocidad el peso de una persona, no debería utilizarse nunca sólo, ya que conocer cómo se compone nuestro cuerpo y cuánta grasa tenemos en el mismo así como cuánto músculo aporta a dichos kilos, es fundamental.
De hecho, una persona con sobrepeso marcado puede tener mucho músculo y porcentajes ínfimos de grasa, y por lo tanto, pese a tener un muchos kilos según el IMC no necesitar adelgazar; mientras que una persona que puede tener un peso normal puede tener un porcentaje de grasa elevado y una muy pobre cantidad de masa muscular y entonces, siendo en este caso fundamental realizar ejercicio para optimizar la composición del cuerpo y la salud.
¿Cuánto peso perder para mejorar la salud?
Como hemos dicho, basarnos únicamente en el IMC para saber cuánto peso debemos perder resulta un error y puede resultar muy desestimante y frustrante antes de comenzar cualquier intento para adelgazar.
Por el contrario, es esencial saber que perder sólo entre el 5% y el 10% de nuestro peso corporal actual puede mejorar significativamente nuestra salud, produciendo lo que los nutricionistas llamamos como un fitness metabólico.
Esto puede representar muchos kilos menos por perder y una meta mucho más fácil de lograr que produce cambios considerables sobre nuestro cuerpo. Especialmente, modifica la salud de la siguiente cuatro maneras:
Reduce nuestros triglicéridos y colesterol
Perder solo un 5% de peso corporal puede producir cambios muy positivos en los niveles de colesterol y triglicéridos de nuestro cuerpo ayudando a evitar dislipemias y reducir el riesgo cardiovascular.
Esto es debido a la gran quema de grasas que se produce únicamente perdiendo un 5% de nuestro peso corporal.
Disminuye la presión arterial
Los estudios señalan que al igual que con el colesterol, una pérdida del 5% del peso puede mejorar considerablemente nuestra presión arterial y reducir un punto de la misma por cada kilo de pérdida de peso.
Por todo esto, si queremos prevenir la hipertensión arterial o reducir por debajo de 140/90 nuestros valores, con sólo perder un 5% de nuestro peso actual lograremos grandes cambios y mejoraremos la circulación sanguínea, reduciendo considerablemente el riesgo cardiovascular.
Reduce el riesgo de diabetes tipo 2
La diabetes tipo 2 es una enfermedad que va de la mano del funcionamiento de nuestro metabolismo y el porcentaje de grasa que tenemos en nuestro cuerpo.
Por eso, las investigaciones confirman que la pérdida de alrededor de un 7% de nuestro peso reduce el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en un 58% y nos aleja de problemas graves como daños de los vasos sanguíneos, de los riñones, de los ojos y del sistema nervioso, que pueden ocasionar altos niveles de glucosa en sangre a causa de una diabetes tipo 2 mal controlada.
Disminuye el dolor articular y el riesgo de osteoartritis
Tener kilos de más puede sobrecargar nuestras articulaciones provocando inflamación y daño en las mismas.
Así, los estudios muestran el sobrepeso duplica el riesgo de que una persona desarrolle osteoartritis, mientras que la obesidad aumenta el riesgo cuatro veces
Sin embargo, la buena noticia es que pequeñas pérdidas de peso reducen considerablemente la tensión en nuestras articulaciones y las investigaciones señalan que por cada kilo perdido se disminuye en cuatro veces la carga ejercida sobre las rodillas en cada paso que damos durante actividades cotidianas.
Por todo esto, perder entre un 5% y un 10% el peso corporal actual puede ser suficiente para mejorar considerablemente la salud, y de seguro es mucho menos de los que pensabas.
En DAP | Los siete regímenes que puedes usar para adelgazar y que poseen respaldo científico
Imagen | Foto de portada: SHVETS production, foto 1: i yunmai, foto 2: Karolina Grabowska.
Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com
VER Comentarios