Seis alimentos que necesitan ser reivindicados en nuestra dieta

El mundo de la alimentación está rodeado de falsos mitos que muchas veces perjudican la reputación de los ingredientes que solemos emplear, y prueba de ello son estos seis alimentos que necesitan ser reivindicados en nuestra dieta.

Zanahoria: ¿exceso de azúcar?

Quizá por ser una hortaliza de sabor dulce, muy agradable al paladar, y también por su gran utilización en pasteles y postres, la zanahoria siempre se ha asociado a mucho azúcar para nuestra dieta.

Sin embargo, a pesar de que sí poseen azúcares naturales, su proporción no es elevada y su fibra reduce la absorción de los mismos en nuestro organismo, por lo que en nada se compara la zanahoria con un refresco o una chuchería.

Es decir, la zanahoria no posee exceso de azúcar sino algunos azúcares naturales que podemos disfrutar con su consumo. Pero además, es rica en vitamina A, carotenos, potasio y calcio para nuestra dieta y no aporta muchas calorías a la misma.

Entonces, la zanahoria no es una hortaliza que debamos limitar ni mucho menos erradicar de la dieta si buscamos perder peso o controlar nuestra diabetes.

Pepino: sólo agua para ofrecer

El pepino es otro alimento que deberíamos reivindicar en nuestra dieta, pues si bien posee gran contenido acuoso y por ello, resulta muy pobre en calorías, no sólo tiene agua para ofrecer.

Esta verdura aporta además de mucha agua, fibra, minerales como el potasio o el magnesio y ## vitaminas del complejo B así como vitamina E con función antioxidante.

Entonces, no sólo para hidratar el contorno de nuestros ojos o elaborar un zumo o sopa fría sirve el pepino, sino que este ingrediente tiene mucho más para ofrecer a nuestros platos y por ello, podemos sumarlo a ensaladas, bocadillos o aperitivos varios.

Maíz: muy rico en fructosa

El jarabe de maíz de alta fructosa que tanta mala reputación tiene hoy en día, es un derivado del maíz pero no es el maíz en sí, por lo tanto, una mazorca o los granos de maíz cocidos no son ricos en fructosa o azúcares para nuestra dieta.

El maíz si posee una considerable cantidad de hidratos de carbono y algunos de ellos son azúcares que caracterizan su sabor dulce, sin embargo, también poseen mucha fibra que en nuestro cuerpo produce un efecto muy diferente a lo que provoca un refresco por ejemplo o un zumo comercial que sí poseen jarabe de maíz de alta fructosa.

Además, la mazorca de maíz tiene mucho más para ofrecer que un alimento industrial al cual se ha añadido jarabe de maíz de alta fructosa y posee muchas menos calorías que que el endulzante ampliamente usado en productos procesados.

Menta: una bella hierba de decoración

La menta fresca, la hierba como tal, generalmente se utiliza para decorar platos dulces o aportar su tono verde a diferentes preparaciones, sin embargo, necesita ser reivindicado como un ingrediente que no sólo sirve de decoración.

Esta hierba es una concentrada fuente de nutrientes buenos para nuestros platos, tales como calcio, potasio, vitamina C, hierro y ácido fólico, además de fibra y carotenos antioxidantes.

Además, puede ofrecer un agradable aroma y sabor a nuestras preparaciones, por eso, necesita ser reivindicada en nuestra dieta y en la cocina para que no sólo la usemos como decoración sino también, para infusionar postres, para elaborar cremas o salsas, para rellenar pasteles junto otros ingredientes u otras opciones más.

Lechuga: sólo volumen para nuestros platos

La lechuga que en todas sus versiones suele usarse como base de otros platos o que agrega gran volumen a los mismos, no sólo ofrece eso, sino también, valiosos nutrientes y propiedades.

Todos los tipos de lechuga son ricos en agua, pobres en calorías y constituyen una buena forma de sumar carotenos y vitamina A así como diferentes vitaminas del complejo B a nuestros platos.

Además, no sólo abultan las preparaciones, sino que ofrecen textura, color y fibra así como otros nutrientes como los antes dichos.

Por ello, la lechuga no sólo debe ser usada como base o "relleno" de nuestros platos, sino que necesita ser reivindicada en nuestra dieta si queremos sacar provecho a sus positivas propiedades.

Uvas: fruta que engorda y concentra calorías

Las uvas al igual que el plátano por ejemplo, es una fruta muy maltratada por falsos mitos, pues solemos pensar que concentra calorías y por ello, puede hacernos engordar.

Sin embargo, las uvas como otras frutas son excelentes fuentes de nutrientes, aportan agua, fibra, potasio, vitaminas del complejo B y antioxidantes muy recomendables para el organismo.

Pero lo mejor, son un ingrediente de baja densidad energética, ya que no alcanza las 70 Kcal por cada 100 gramos que ingerimos, por lo tanto, es imposible engordar con su consumo.

Éstos son seis alimentos que necesitan ser reivindicados en nuestra dieta para que sepamos aprovechar al máximo sus propiedades y dejemos de juzgarlos negativa e injustamente.

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