Cómo hacer pasta fresca en casa, los utensilios que necesitas y 21 recetas para sacarles todo el partido

Hacer pasta fresca en casa es mucho más sencillo de lo que a priori podamos pensar. No será tan sencillo como abrir un paquete de pasta y a la cazuela, pero sí más gratificante. Y también más sabrosa. El pequeño esfuerzo que requiere hacer pasta fresca casera se ve compensado con creces.

Además se puede personalizar, permite dar rienda suelta a nuestra imaginación y crear rellenos y sabores imposibles de encontrar en las tiendas. Hacer pasta fresca en casa merece mucho la pena. Os aseguramos que una vez la probéis no querréis comprar pasta en las tiendas nunca más.

Cómo hacer pasta fresca

La receta básica de pasta de huevo no puede ser más sencilla. Para hacer dos raciones de pasta fresca se necesitan 200-220 gramos de harina de trigo de todo uso, dos huevos talla L y una pizca de sal.

Con los ingredientes listos sólo hay que colocar la harina y la sal sobre la mesa de trabajo, hacer un hueco en el centro donde depositar los huevos y empezar a batir. Poco a poco el huevo irá cogiendo harina y tendremos que ir mezclando y amasando hasta obtener una masa homogénea.

A partir de aquí sólo queda dejar reposar la masa antes de estirar la masa lo más fina posible, cortar en la forma deseada, rellenándola o no, y dejar secar antes de cocer. Fácil ¿verdad? Lleva un pelín de tiempo, pero es algo divertido y merece la pena. Toda ocasión lo merece.

¿Qué utensilios necesitamos para hacer pasta fresca en casa?

Los básicos: rodillo y cuchillo

Además de una superficie de trabajo amplia y nuestras manos, hay dos utensilios básicos que se necesitan para hacer pasta fresca en casa: un rodillo y un cuchillo. Con ello podremos hacer laminas para lasaña, canelones, fetuccine, tagliatelle, tallarines, papardelle y muchos más.

En cuanto al rodillo, los hay de materiales diferentes. De acero inoxidable (nuestro favorito), de madera, de silicona y de polietileno. Cualquiera de ellos cumple la función de estirar la masa, pero cuanto más grande sea mucho mejor y práctico.

Lo mismo ocurre con el cuchillo. Hay de muchos tipos y todos ellos sirven, siempre y cuando estén bien afilados y tenga una hoja lo suficientemente largae como para poder cortar la pasta sin problema. No obstante hay cuchillos específicos para cortar pasta con la hoja plana con los que se consiguen mejores resultados.

Máquinas y cortadores de pasta

Los utensilios básicos están bien para empezar y comprobar si el mundo de la pasta fresca es lo nuestro. Si descubrimos que este es el caso lo más conveniente es barajar otro tipo de accesorios que nos ayuden en la manipulación de la masa, acortando el tiempo de elaboración y ofreciendo un resultado más profesional.

Además, el rodillo puede no ser una opción para todos. Se requieren fuerza y maña para su manejo y conseguir un resultado uniforme tiene su aquel. En este caso y en el anterior lo mejor es usar una máquina para pasta, ya sea manual o eléctrica.

Las máquinas manuales constan de un cuerpo principal con un rodillo para hacer láminas que luego nos servirán para hacer los distintos tipos de pasta. A la base se le pueden añadir diferentes accesorios. Los modelos más básicos son manuales y funcionan a manivela. Seguro que estáis familiarizados con ellas.

También hay máquinas eléctricas para pasta que realizan el trabajo completo: desde el amasado hasta el formado o cortado de la pasta. Hace tiempo probamos el modelo más compacto de Phillips y nos encantó que hace el trabajo sucio por nosotros, el poco espacio que ocupa, entre otras cosas. La marca tiene un modelo más actual mejorado, con un funcionamiento muy rápido y capaz de preparar hasta ocho variedades diferentes.

Raviolis y otras pastas rellenas

Para la preparación de pastas con relleno, concretamente los raviolis, existen utensilios específicos. Desde rodillos de corte múltiple, hasta bandejas especiales o rodillos manuales, los que menos espacio ocupan y a los que se puede dar otros usos (galletas, empanadillas y otras masas).

Secadores de pasta

Una vez lista y formada la pasta, el último paso del proceso es el secado. Las pastas rellenas se pueden dejar secar sobre una bandeja de horno o una tabla de madera, utensilios que todos tenemos en nuestras casas. Sin embargo las pastas largas requieren de un secador a no ser que no importe llenar los respaldos de las sillas de espaguetis.

21 recetas de pasta para todos los gustos

Ya tenemos la pasta lista y ahora solo queda decidir cómo prepararla. Entre fettuccine, tagliatelle, pappardelle, mafaldine, ravioli, lasaña y canelones se encuentran nuestras propuestas. Pero no son las únicas posibilidades. Pasead por nuestra sección de recetas de pasta para picar más ideas de salsas y otras combinaciones.

• Fettuccine alfredo
• Tagliatelle con salsa de setas, tomate seco y almendras
• Pappardelle con frutos del mar y tomates
• Tagliatelle con pesto alla calabrese
• Tagliatelle con salsa cremosa de salmón ahumado
• Tagliatelle paglia e fieno con nata y jamón

• Mafaldine al vino tinto
• Fettuccine con berenjenas gratinadas y tomates
• Ravioli tartufo
• Pasta fresca rellena y frita
• Canelones Rossini
• Canelones de espinacas gratinados
• Canelones de la abuela
• Canelones de atún, tomate y huevo

• Lasaña de carne tradicional
• Lasaña del pollo al curry
• Lasaña de verduras
• Lasaña de jamón, queso y pesto
• Lasaña Vincisgrassi

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