Hace años tuve una vecina que acostumbraba a llevar su café preparado de casa en una taza metálica muy aparente. Al parecer lo iba bebiendo mientras llegaba al trabajo. A mí me resultaba una costumbre de lo más cool, pero al parecer era una costumbre extendida en Miami, donde ella había vivido una larga temporada. De aquello saqué dos conclusiones: que viajo muy poco, y que a mí me gusta beber el café sentada y tranquila.
Al ver esta taza su recuerdo me ha venido inevitablemente a la cabeza. Se trata de una taza reutilizable que nace con un planteamiento ecológico, ya que se puede llevar encima para evitar gastar un envase cada vez que pedimos un café para llevar. En consonancia con su destino, tiene un diseño que recuerda a los vasos que se utilizan en algunas cadenas de esas que venden el café a precio de oro.
Se llama Keepcup y tiene un atractivo diseño que puede personalizarse según el gusto de cada cual, pudiendo diseñar una taza personal jugando con los distintos colores del vaso y sus complementos. Tiene un cierre en la parte superior que sella la tapa para evitar derrames, y una banda que protege las manos del calor de la bebida.
Vía | Compradicción En Directo al Paladar | Mori cups, tazas para invidentes En Directo al Paladar | Tazas medidoras con forma de matrioskas