¿A quién se le iba a ocurrir ponerle un grifo de cerveza a una lata? Pero no a una de esas latas (barriles) de 5 litros, y que tiene su sentido poner un grifo que encima enfríe. En este caso me refiero a una lata de las de 33 cl.
Pues quién iba a ser, a los japoneses se les ha ocurrido hacer un minigrifo de cerveza portatil. El funcionamiento muy sencillo. Se pincha el grifo en la lata, se sirve y cuando está llegando al final se acciona un mecanismo que le da presión a la lata para que salga espuma.
Ahora seguro que no se parece ni por asomo a una buena caña tirada en una taberna de Madrid. Por ahí no paso, lo siento. Por cierto, su precio, 31 euros.
Vía | No puedo creer En Directo al Paladar | Un barril de cerveza en tu casa En Directo al Paladar | Homepub, el frigorífico con grifo de cerveza