El cultivo de calabazas gigantescas atrae a muchos aficionados de todo el mundo
Pasan los años y la pasión por cultivar verduras gigantes no parece perder fuelle, animados por concursos que generan gran expectación entre los visitantes. Por razones obvias, la calabaza es la hortaliza reina de estos certámenes, y Europa ya tiene a un nuevo y ambicioso ganador. Bélgica puede presumir de un nuevo campeón entre sus vecinos, y quiere conquistar el mundo con su criatura.
Se llama Mario Vangeel y logró aplastar a todos sus rivales el pasado 13 de octubre en el Campeonato Europeo de Calabazas, celebrado en el marco del Kürbisausstellung Ludwigsburg, el festival o exposición de calabazas de la ciudad alemana de Luisburgo. Un evento que cada otoño congrega a miles de visitantes que acuden a contemplar los más de 400.000 ejemplares, a sorprenderse con las esculturas vegetales, a probar infinidad de platos a base de calabaza, y a asombrarse con el concurso de pesaje.
En esta ocasión Vangeel da un paso más en su palmarés tras haberse proclamado vencedor de Bélgica ya en 2019, demostrando que no es ni un novato ni un simple aficionado más en este peculiar arte. En 2021 rozó el estrellato, con una calabaza que quedó en segundo lugar tras el récord mundial del italiano Stefano Cutrupi aquel año.
Ahora, con su ejemplar de 1.152 kg, algo así como un coche pequeño, este belga de 50 años y tractorista de profesión espera dar el salto definitivo y conseguir el primer premio en el campeonato mundial. A pesar de que, como ha confesado a Euronews, no las tenía todas consigo este año y no esperaba ganar cuando se presentó.
El secreto de su éxito, según ha revelado, es una simple y afortunada combinación de factores favorables: "Tenía una buena semilla, la planta crecía bien, estaba lo suficientemente caliente y le di un buen fertilizante". Eso sí, no revela detalles sobre qué fertilizante es el que utiliza, pues cada agricultor crea su propia mezcla y la fórmula la guardan bajo llave para no dar ventajas a sus rivales.
Las variedades gigantes de calabaza que emplean los aficionados a estos concursos no se cultivan por su sabor, pues tienen un alto contenido en agua que las hace bastante insípidas. En su lugar, se dedican a llevarlas por exhibiciones y también para usos más creativos, como los que se hacen en el propio festival alemán, convirtiéndolas en obras de arte e incluso barcas para organizar carreras de 'regatas', otra de las actividades que más público atrae en estos festivales.
Imagen | Mario Vangeel
En DAP | Se llama Michael Jordan, pesa 1.247 kilos y es la calabaza más grande del mundo
Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com
VER Comentarios